El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu investigará a Banco de Madrid y a siete exmiembros del Consejo de Administración, entre ellos su expresidente José Pérez Fernández, por posible delito de blanqueo de capitales, al entender que podrían haber causado «numerosos» perjuicios no solo a los depositantes e inversores, sino a la propia entidad y a la economía nacional.
Andreu ha acordado admitir a trámite la querella presentada por dos sociedades clientes del banco Marine Instruments y Liuniaski, contra la entidad intervenida y contra siete miembros de su consejo de administración. En concreto, se dirige contra el expresidente y exdirector del servicio de Supervisión del Banco de España José Pérez Fernández; el ex consejero delegado Joan Pau Miquel Prats; los antiguos vocales Higini Cierco Noguer y Ramón Cierco Noguer; Ricard Climent Meca; Soledad Núñez Ramos, exdirectora general del Tesoro, y el entonces secretario Rodrigo Achirica Ortega.
En el escrito se relatan los motivos por los que el Banco de España decidió intervenir esta entidad bancaria, a raíz de la propuesta de actuación del Departamento del Tesoro de EEUU, respecto a Banca Privada de Andorra, matriz de Banco de Madrid. La querella explica todas las circunstancias que han originado la situación concursal de Banco de Madrid, así como la situación de pánico y desconfianza generada en sus clientes.
Para el juez, los hechos denunciados podrían haber causado numerosos perjuicios no solo a los depositantes e inversores y a los querellantes, «sino a la propia entidad y a la economía nacional en su conjunto».
La Fiscalía de la Audiencia Nacional informó favorablemente a la competencia de este tribunal para investigar los hechos y a recabar en Anticorrupción la información sobre si existen investigaciones preliminares sobre esta materia, propuesta que ahora asume el juez Andreu.
No obstante, con carácter previo a practicar cualquier diligencia, se ha dirigido a la Fiscalía Anticorrupción para confirmar si está tramitando diligencias sobre estos mismos hechos y de ser así, recabarlas para evitar duplicidades.
De hecho, la Fiscalía Anticorrupción ya abrió sus propias diligencias de investigación el pasado 13 de marzo a raíz de la denuncia que ese mismo día le presentó la unidad de inteligencia financiera española, el Sepblac, tras detectar operaciones irregulares que podrían indicar que la entidad ayudó al blanqueo de capitales.
Fuente: El Mundo