El fallecido presidente Hugo Chávez condonó secretamente una deuda de 26.33 millones que Nicaragua le debía a Venezuela, en una operación que fue considerada como ilegal por los auditores del Fondo Nacional para el Desarrollo Nacional (Fonden ) a quien habría ordenado cubrir el monto. En la imagen, Daniel Ortega, presidente de Nicaragua. y Hugo Chávez Frías.
Según documentos internos obtenidos por El Nuevo Herald, Chávez ordenó al Fondo Nacional para el Desarrollo Nacional (Fonden ) que realizara el pago de la deuda contraída por el país centroamericano ante el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (Bandes).
Los documentos, obtenidos a través de integrantes del equipo del Fonden encargado de la auditoria interna, también documentan una serie de curiosos desembolsos a organizaciones africanas vinculadas al fallecido dictador libio Muamar Gadafi, operaciones el personal también consideraba violatoria de los estatus del organismo.
Aun cuando el fondo era administrado por Chávez sin que sus gigantescos desembolsos fuesen supervisados por la Asamblea Nacional, las actas de constitución del FONDEN limitan el uso de sus recursos a proyectos para el desarrollo económico y social de Venezuela.
El Fonden , alimentado por los excedentes de la renta petrolera cuando los precios del barril superan los calculados en el presupuesto nacional, administró más de $82,000 millones entre el 2005 y el 2011. El uso de gran parte de esos recursos constituye un misterio para la mayoría de los venezolanos.
Según ex empleados del fondo, Chávez emitía órdenes de desembolsos tratando los recursos como si se tratara de su propio dinero.
En algunos casos, “no existía ningún asidero jurídico que justificara que el Fonden pagara, sin ningún motivo, sin ninguna causa más allá de la orden, prácticamente militar de Chávez”, dijo uno de los funcionarios que hablaron con el Nuevo Herald bajo condición de anonimato.
Los consultados dijeron que ese era el caso del punto de cuenta firmado por Chávez en marzo del 2007 que ordenaba al Fonden pagarle al Bandes los $26.33 millones.
Según el documento, Nicaragua tenía ante el Bandes un capital vencido de $22.52 millones, intereses vencidos por $2.37 millones, además de una deuda frente al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) de $1.43 millones, incluyendo capital y e intereses vencidos.
La orden de Chávez obligó al Fonden a pagar las deudas ante el BID y el Bandes. Las fuentes consultadas no lograron enterarse en que utilizó Nicaragua esos montos.
El argumento empleado por Chávez para perdonar la deuda fue que Nicaragua ya había solicitado repetidas veces la condonación de los montos, como parte de la iniciativa de Países Pobres Altamente Endeudado.
Pero los auditores del Fonden argumentaban que éstos desembolsos a Nicaragua violaban los lineamientos de constitución de la entidad, creada para financiar proyectos de desarrollo en Venezuela.
Los cuestionamientos, sin embargo, fueron engavetados por los directores del Fonden .
Adicionalmente, Venezuela continuó brindando asistencia financiera a Nicaragua aún cuando el país centroamericano había demostrado no estar en capacidad de repagar sus deudas.
Para finales del 2012, Nicaragua le adeudaba a Venezuela más de $2,715 millones por el suministro de crudo a través de Petrocaribe, y $2,464 millones de ese monto se trataba de obligaciones que para ese entonces ya se encontraban en morosidad.
El personal de auditoría interna del Fonden también mostró preocupación por operaciones realizadas por el organismo a países fuera de la región, y en especial un aporte de $10 millones otorgado al Fondo para Apoyar Financieramente Proyectos de Desarrollo Social y Humanitario en África”.
Según los documentos obtenidos, parte de esos fondos fueron utilizados para financiar organizaciones de dudosa procedencia, incluyendo la Fundación para los Estados Unidos de Africa, iniciativa del fallecido líder libio Muamar Gadafi, pero cuyos desembolsos curiosamente eran realizados a una cuenta bancaria en Mali.
Otra de los desembolsos de inquietud involucraba el pago de $600,000 destinado a la Construcción del Centro de Formación Femenina “Museo de la Mujer Musokunda” en Africa, operación que fue aprobada sin que se cumplieran con los debidos requisitos y que también involucraba transferencias a Mali.
Ninguna de esas operaciones fomentan el desarrollo social y económico de Venezuela, insistieron los consultados.