“Por cada policía caído 250 ciudadanos quedan desamparados”, calculó el comisario, director de la Policía de Miranda y secretario de Seguridad del estado Miranda, Pablo Elisio Guzmán. Estas palabras fueron publicadas a través de un comunicado enviado el 7 de marzo de este año, cuando uno de sus hombres fue asesinado al llegar a su casa. Imagen referencial
En ese momento seis funcionarios policiales habían sido asesinados en solo 72 horas. Pero, dos días después la cifra aumentó a diez – si se cuenta a un expolicía de Baruta-, con lo cual la cantidad de efectivos caídos en manos del hampa en la Gran Caracas se ubicó en 29 en lo que va de año.
Según los cálculos del comisario Guzmán, 7.250 habitantes de Distrito Capital, Miranda y Vargas quedaron “desamparados”.
En estos hechos registraron bajas la Policía de Falcón, de Miranda y de Bolívar; así como la Policía Municipal de Chacao, el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas y la Policía Nacional Bolivariana.
De ocho funcionarios asesinados en los últimos seis días, a seis los intentaron despojar de sus pertenencias, vehículo o arma de reglamento y a cuatro de ellos les dispararon en la cabeza.
