Moody’s detalló en su reporte que el cambio de perspectiva sobre la calificación de Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) se debió a la caída del precio de petróleo que presionó los perfiles de crédito de la compañía y las finanzas del gobierno.
“(La situación de las finanzas del gobierno) dificulta su capacidad de proporcionar un apoyo extraordinario a su empresa y aumenta los riesgos para los acreedores”, dijo Nymia Almeida, jefa de créditos de Moody’s Investors.
La calificación de PDVSA cambió de estable a negativa en línea con el cambio de perspectiva estable a negativa de los bonos soberanos de Venezuela, dada la importancia de la compañía como fuente de ingresos para el gobierno.
Moody’s prevé que el continuo deterioro fiscal y de la economía de Venezuela volverá más dependiente al gobierno de PDVSA y el acceso de la compañía a capitales continuará afectada por las preocupaciones sobre el soberano venezolano. Semana Económica.