El presupuesto superior a los 122 mil millones de bolivares que recibió la La Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) en el 2015, el mayor monto de las empresas adscritas al Ministerio de Energía Eléctrica, no aparecen haber sido dedicados al mantenimiento y mejoramiento de este fundamental servicio, si tomamos en cuenta los constantes apagones por fallas y los cortes programados de cuatro horas cada día.
La ONG Transparencia Venezuela desgloso la asignación preupuestaria y analizó la situación, como a continuación presentamos:
Un total de Bs. 122.744.116.034 recibió Corpoelec para su funcionamiento y ejecución de proyectos, según Memoria y Cuenta del Ministerio de Energía Eléctrica 2015, convirtiéndolo en el ente adscrito que más dinero recibió en el año. Sin embargo, el rendimiento del organismo deja mucho que pensar, de los 35 proyectos registrados en el informe de gestión, 16 no presentó ningún avance físico.
En el contexto de un país sumido por segunda vez en un marcado déficit de generación de energía eléctrica, que obligó la implementación de un programa de racionamiento eléctrico inconsulto y no informado, que afecta el desarrollo empresarial, comercial y el disfrute de un nivel de vida adecuado para los venezolanos; Transparencia Venezuela ha venido alertando sobre la necesidad de un uso eficiente, responsable y transparente de los recursos destinados para paliar la “emergencia eléctrica” decretada por el gobierno el 21 de diciembre de 2009, en el marco de la cual se creó un ministerio y se asignó millones de recursos económicos.
Tras realizar un análisis de la Memoria y Cuenta del Ministerio de Energía Eléctrica 2015, con especial énfasis en el ente adscrito Corpoelec, se detectaron elementos que sedimentan la tesis de que el colapso eléctrico no es responsabilidad exclusiva del fenómeno El Niño, sino del uso discrecional e ineficiente de los recursos. Solo el año pasado el Estado venezolano se endeudó por 191.133.687 dólares para desarrollar cuatro proyectos del sector eléctrico que, al final, no se ejecutaron.
Durante ese periodo Corpoelec recibió dinero de los fondos Chino, Independencia y Miranda, pero no detalle en qué invirtió esos recursos, lo que dificulta la contraloría y deja un margen de discrecionalidad en la administración de los recursos públicos.
En el documento Corpoelec tampoco explica qué hizo para cumplir con su responsabilidad de “compensar a los usuarios los daños causados como consecuencia de fallas en la prestación del servicio eléctrico, tal y como lo establece la Ley Orgánica del Servicio Eléctrico”, y admite que no inspeccionó las obras civiles electromecánicas de la Planta Termozulia III.
El informe de gestión de Corpoelec destaca que invirtió Bs. 185.135.098 para expandir la infraestructura de generación termoeléctrica en el Oriente del país, pero la obra solo avanzó en un 0,05%. Destinó Bs. 4.917.450.516 a diez obras cuya ejecución no avanzó en 2015. También muestra, al menos, cinco proyectos que están atrasados y siguen engordando su presupuesto de ejecución.