Caracas.| El empresario José Luis Santoro no comparecerá ante la justicia dominicana por la presunta estafa de más de 29 millones de dólares a los ahorristas del fallido Banco Peravia, pues el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) rechazó entregárselo. Sin embargo, eso no significa que ya no tendrá que rendir cuentas por este caso, pues el organismo prometió que lo procesará.
La información figura en la sentencia E16-82 de la Sala Penal, en la cual desechó la extradición que en abril pasado interpuso la Fiscalía de la isla caribeña contra Santoro, en cumplimiento del artículo 69 de la Constitución, el cual prohíbe poner a disposición de tribunales extranjeros a venezolanos o venezolanas.
En el fallo redactado por la magistrada Francia Coello el máximo juzgado expresó su “firme compromiso de iniciar el procedimiento tendiente a la investigación de los hechos por los cuales se realizó la solicitud de extradición examinada” y por ello instó al Ministerio Público para que “solicite a la República Dominicana, a través del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores, cualquier elemento probatorio que estime necesario y que pueda servir para el esclarecimiento de los hechos relacionados con la investigación que fue iniciada primigeniamente en la República Dominicana, y que le son atribuidos al ciudadano requerido”.
El despacho dirigido por Luisa Ortega Díaz se opuso a la entrega de Santoro no solo por la prohibición constitucional sino porque además informó que en el Tribunal 20 de Control de Caracas hay abierta una causa por legitimación de capitales desde junio pasado.
Como prueba de su intención de procesar a Santoro, el TSJ le ordenó al Tribunal 20 de Control de Caracas celebrar cuanto antes la audiencia preliminar, donde se decidirá si es enjuiciado o no; y además acordó mantenerlo detenido en el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), donde permanece desde que fuera aprehendido por Interpol el 1 de marzo.
Santoro fue presidente del Banco Peravia, el cual fue intervenido por las autoridades financieras dominicanas a principios de 2015 por presentar un hueco en sus finanzas. Las investigaciones han arrojado que más de 29 millones de dólares fueron desviados por los responsables de la institución. El Universal