Caracas | Las reservas internacionales en poder del Banco Central de Venezuela, se ubicaron al cierre de esta semana en 11.930 millones de dólares, lo que representa una disminución de 198 millones de dólares respecto a la semana previa. Pero más allá de eso, refleja una situación de estrechez representada por unos ingresos petroleros afectados por los bajos precios internacionales y el cumplimiento de las obligaciones de deuda externa.
La información De Alan Lugo G. en El Universal precisa que en efecto, los compromisos de pago de deuda del presente año, tanto de Pdvsa como de la República, totalizan 10.118 millones de dólares, tanto en capital como en intereses. Tales compromisos han sido atendidos oportunamente, según han informado las autoridades.
Los desembolsos vinculados a esos pagos, han afectado seriamente la disponibilidad de reservas. Solamente, en lo que va de año, el saldo de las reservas internaciones se ha contraído en 4.400 millones de dólares.
El año pasado, el país tuvo que atender pagos de deuda por 10.755 millones de dólares. En ese lapso, las reservas se contrajeron en 5.710 millones de dólares, dados los menores ingresos por concepto de exportación petrolera.
En ese año, el precio promedio de la cesta de crudos y productos de Venezuela se contrajo a la mitad, al pasar de 88,42 dólares por barril en 2014 a 44,65 dólares en 2015.
En 2016, la contracción relativa fue menor, pero representa una baja sobre unos precios ya deprimidos. Así pues, el promedio de la cesta petrolera ha sido estimada por el Ministerio de Petróleo en 32,95 dólares por barril. Es decir, una contracción adicional de 26,2%.
En suma, desde 2014 el precio promedio de la cesta petrolera venezolana se contrajo en 62,7%, mientras que durante ese período los pagos de deuda representaron 20.873 millones de dólares.
Para el año venidero, los pagos totales de deuda están estimados en 11.151 millones de dólares, lo que representará una limitación importante, a menos que los precios internacionales del petróleo se recuperen.
Sin embargo, en este campo no existen proyecciones ciertas que apunten a un alza de precios. La situación de sobre oferta sigue pesando en el mercado petrolero, mientras que la OPEP ha mostrado resistencias a utilizar la estrategia de reducir la oferta para impulsar los precios. Ello se debe a que, según han argumentado algunos productores de la organización, tal política conlleva a una pérdida de mercados que no están dispuestos a asumir.
El comportamiento de los precios petroleros en los últimos meses ha estado signado por vaivenes que no terminan de definir una tendencia.
Entre tanto, algunos países cifran sus esperanzas en los resultados de la reunión de OPEP que tendrá lugar en Argel entre el 26 y el 28 del presente mes.
Existen dudas acerca de los resultados de ese encuentro, dado que la capacidad de la OPEP para influir en el mercado ha bajado, pues apenas representa un tercio de la oferta de petróleo del mundo. Además, no todos los países productores están urgidos de un mejoramiento de precios.