CCD | En el estado Carabobo continúa la tensión en la ciudadanía debido a los actos vandálicos que se han generado en los últimos días en la entidad. Los comerciantes comenzaron a recoger la mercancía ante la posibilidad de ser víctimas de saqueos, los vecinos comenzaron a vigilar sus zonas por una eventual irrupción a las viviendas, y comenzaron las compras nerviosas ante la escasez de algunos productos y para resguardarse con provisiones.
La situación se ha generado en los municipios de la Gran Valencia: Naguanagua, Libertador, Los Guayos, Valencia y se ha extendido al municipio Carlos Arvelo. Fedecámaras Carabobo ya ha confirmado cerca de 80 locales afectados.
Vecinos denuncian que quienes realizan estos actos vandálicos son personas ajenas a la localidad y tampoco son manifestantes, además de la existencia de registros de funcionarios policiales de Carabobo y la Guardia Nacional llevándose artículos de los establecimientos saqueados.
Adicionalmente se activó el Plan Zamora, el cual es bastante desconocido por los ciudadanos, pues muchos se sienten inseguros con el Plan y denuncian que se reprimen a las manifestaciones opositoras pero no se logró evitar que se generara esta cantidad de saqueos.
También se mantiene afectado el transporte público, pues está funcionando un 30% y se suspendieron las clases para resguardar la seguridad de los estudiantes. Hay compras compulsivas tratando de resguardarse con provisiones en las casas, además de fuertes colas para surtir los carros con combustible.
Veinte millones de dólares en pérdidas contabilizan comerciantes
Por lo menos 20 millones de dólares han contabilizado en pérdidas los comerciantes cuyos negocios han sido saqueados en Valencia, estado Carabobo.
El cálculo lo proporcionó el presidente de la Cámara de Comercio de esa ciudad, Guillermo Manosalva, añadiendo que en tan solo 72 horas, 83 comercios han sido afectados.
“El miércoles, cuando me vine a Margarita para asistir a la Asamblea de Consecomercio, teníamos el registro de 48 negocios atacados en acciones hamponiles, pero hoy (jueves) ya me informan desde la cámara que sumamos 83”, afirmó.
Lea también: En 48 horas han saqueado 80 comercios en Valencia
Explica que según lo que van percibiendo, las acciones vandálicas son dirigidas a comercios y zonas específicas; precisamente los más afectados son pequeños y medianos empresarios. “Nos damos cuenta que se trata de acciones organizadas y premeditadas”, se atrevió a señalar Manosalva.
Le preocupa que la situación va creciendo ante la inacción de los cuerpos de seguridad, y temen que pueda repetirse lo que pasó en Ciudad Bolívar, donde 600 comercios fueron afectados.
“Estamos a tiempo de parar la acción. Les hemos hecho reiterados llamados a los cuerpos de seguridad y al Gobernador, para que con los cinco alcaldes que conforman la gran Valencia se haga un operativo de acción preventiva, persuasiva y de inteligencia para aplicar la ley, pero lo que vemos es inercia. Ni siquiera ha habido detenidos”.
El dirigente empresarial destacó que además de estarse afectando enormemente la situación económica de los comerciantes, se está disparando el desempleo, y deduce que entre los 83 comercios saqueados hay por lo menos 300 empleados que quedaron a la deriva.
“Las manifestaciones no son las culpables, y aunque no sepamos de inteligencia delictiva, es fácil ver que la apariencia de quienes actúan es delincuencial, además andan encapuchados y actúan a partir de las 6 de la tarde. Se les percibe cierta organización”.
Informó estar en conocimiento del cambio del Comandante del Core 2 para la aplicación en el estado del Plan Zamora; sin embargo, considera que lo más idóneo es que el Consejo Federal de Gobierno haga un llamado de emergencia para aplicar fuertes medidas de seguridad.
Residencias también bajo asedio nocturno
Las cacerolas empiezan a sonar. De a poco se van mostrando las cabezas, tímidas, en los balcones y rejas. Acompañan los pitos y se desatan los insultos eventualmente. De pronto, las urbanizaciones son un caos frenético de ruidos, humo tóxico, detonaciones y heridos.
Las zonas residenciales de Carabobo han estado bajo asedio desde que comenzaron las protestas antigubernamentales de abril, en la mayoría de los casos por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y funcionarios de la policía regional, pero en otros casos los atacantes son “colectivos”, grupos paramilitares armados que defienden al Gobierno, o simples hordas de delincuentes que buscan saquear lo que encuentran a su paso.
La situación no para. La noche del jueves se reportó que efectivos de la GNB incursionaron de manera agresiva en varios conjuntos residenciales de La Granja, en el municipio Naguanagua y al norte de Valencia.
Los uniformados reprimieron y habrían disparado contra los postes de electricidad para dejar las calles oscuras, según reportes de vecinos. Ciudadanos se habían congregado minutos antes para mantenerse alertas ante el acecho de colectivos. En Morichal se reportan bandas de motorizados rondando, pero, al parecer, son policías. Y en Bella Vista se escuchan detonaciones.
Algo similar pasó en el Doral Country, en El Rincón. Los vecinos tuvieron que bajar para organizar vigilancia. Los colectivos, que suelen rondar en bandas de motorizados, son la principal preocupación para los habitantes en esa zona de Naguanagua. En la mayoría de los casos, su único objetivo es causar destrozos, dañar los vehículos aparcados y las fachadas de edificios. Lo hacen en represalia contra los vecinos que protestan pacíficamente, con cacerolas o trancando calles con barricadas. Amedrentamiento puro.
Los vecinos de San Diego también se están organizando tras una tarde de fuerte represión que dejó al menos un herido grave, Ender Lugo, cuyo diagnóstico aún es reservado. En el municipio, históricamente de opositores en elecciones, se supo de reuniones en urbanizaciones con los mismos fines: protegerse de los uniformados y de los paramilitares. La tarde estuvo marcada por fuertes enfrentamientos en Los Tulipanes. Allí chocaron cuerpos de seguridad del Estado y manifestantes encapuchados.
En el urbanismo Buenaventura, al oriente de Carabobo, en el municipio Los Guayos, se reportaron incursiones de organismos de seguridad la noche del jueves. Acompañó la característica represión. Los sectores 17 y 31 serían los focos de disturbios más preocupantes para los vecinos, según reportes de la infociudadanía.
No hay un vocero oficial que confirme alguna relación entre los asedios nocturnos a urbanizaciones y la activación este jueves del Plan Zamora en Carabobo, anunciado por el comandante de la GNB, Antonio Benavides Torres.
Se trata de un capítulo que sería inédito en el país: la regionalización de un plan militar de defensa ante protestas antigubernamentales.
Fuente: Con información de El Pitazo
