CCD | Tres años después de registrarse el homicidio de Adriana Urquiola, el indiciado fue sentenciado. La condena impuesta a Yonny Eduardo Bolívar Jiménez, la noche del martes pasado, fue 27 años y 6 meses de cárcel.
Urquiola era intérprete de señas del noticiero Venevisión y estaba esperando a su primer niño. La madre de Urquiola, Manuela Pérez, informó en redes sociales el martes que la Sala 9 de la Corte de Apelaciones dictó la sentencia de 27 años y medio de prisión en contra de Yonny Bolívar, apodado «El Capitán Bolívar».
El asesinato de Urquiola se registró en marzo del 2014, durante las protestas opositoras, en el estado Miranda.
El 23 de marzo de 2014, Urquiola se bajaba de una camioneta en Los Teques en medio de una manifestación. Bolívar disparó en varias oportunidades, hiriendo mortalmente a la mujer, que tenía ocho meses de embarazo. Junto a la traductora de señas, de 28 años, resultó herida Rosángel Pérez, quien sobrevivió.
Bolívar huyó a Colombia y fue detenido en Barranquilla, el 11 de junio de 2015. Había estado evadido de la justicia durante 16 meses. Fue extraditado.
En agosto de 2015, la exfiscal general, Luisa Ortega Díaz, informó que el Ministerio Público había acusado el lunes 3 de agosto al «Capitán Bolívar», por su presunta vinculación con la muerte de Urquiola. Los delitos que le imputaron fueron homicidio calificado con alevosía por motivos innobles en perjuicio de Urquiola y el mismo delito, pero en grado de frustración, en detrimento de Rosalba Pérez, quien resultó herida.
Adicionalmente, fue acusado por uso indebido y posesión ilícita de arma de fuego, todos los tipos penales en concurso real de delitos.
Ante la acusación presentada por el Ministerio Público, se ordenó el pase a juicio de Bolívar, quien permanecía recluido en la sede del Sebin.
Cuatro meses después, en enero de 2016, fue sentenciado a 17 años. Días después, Ortega Díaz señaló que su despacho apelaría la decisión del Tribunal 7° de Juicio del Área Metropolitana. «Ya instruí a los fiscales a apelar la sentencia y que pidan una pena más alta, acorde a la gravedad de los delitos y así hacer justicia».
El juzgado ordenó que Bolívar «cumpla su condena en el Internado Judicial de Carabobo», ubicado en Tocuyito. Meses después, Manuela Pérez —madre de la víctima— denunció que Bolívar había sido llevado «irregularmente» a «Fénix» (Lara). Señaló que, Bolívar «pagaba privilegios en dólares».
Desde la madrugada de ayer, Manuela Pérez dice estar en paz. Agradeció el apoyo de su abogado y en Instagram escribió: Gracias a Dios /Hoy dormiré con mi/corazón de madre y abuela en paz/ HonorALaMemoriaDeMiHijaYNieto».
Fuente: Panorama
