CCD “Cada día será peor porque las refinerías tienen un cierre técnico. Y llegan escasamente 10 mil y 20 mil barriles de combustible (diarios). Es muy bajo lo que está llegando que ni es de 91 octanos”, advierte Iván Freites, dirigente sindical, al conocer el diagnóstico de las operaciones en las refinerías venezolanas, en las últimas 96 horas.
El Centro de Refinación de Paraguaná está en niveles “graves”, lo que incide en responder a los despachos de Bajo Grande en Zulia. A esto se le suma que la importación de combustibles está limitada por la falta de divisas que tiene PDVSA y que “siete (unidades) están operativas, de 84 instaladas en CRP”, alerta Freites.
Explica que las autoridades de PDVSA “permitieron acabar con los inventarios” de gasolina y ahora “no hay” como dar solución. Y no se puede “acometer las reparaciones de las plantas, por lo menos para recuperar la producción en las refinerías, porque no hay almacenamiento. Pasará mucho tiempo para poder recuperarlas”.
“Esto se va agravar a unos niveles que la gente ni se imagina. No hay combustible y el poquito que traen es para medio llenar, pero a los días vuelve a quedarse sin combustible y así vamos a estar. Unos días sin gasolina y otros sin diésel”.
Destaca que el consumo de gasolina bajó por la reducción en la circulación de vehículos. Antes de 2016 el promedio rondaba los 250 mil barriles. En el último reporta se sitúa en 180 mil barriles, indicador que tienden a inclinarse porque “no hay producción” nacional para el mercado interno.
Colas
Desde el domingo largas colas de automotores rodean las estaciones de servicios de Maracaibo y San Francisco. El retraso en el arribo de buques a Bajo Grande causó colapso en las gasolineras. Fue el lunes en la noche que atracó una nave proceden de Amuay, y a la medianoche se agilizó la salida de gandolas por órdenes de PDVSA. “Estamos trabajando las 24 horas”, dijo un transportista.
En las gasolineras de Maracaibo, los encargados aseguran que el sábado “se acabó la de 91 octanos y el lunes inició la crisis porque se acabó la de 95. Nada teníamos. Teníamos tres días sin despacho. Hoy (ayer) nos llegó una gandola de 38 mil combinada”, coinciden en declarar en anonimato.
Desde las 7.30 de la mañana se formaban las colas. Pedro Salazar, usuario, se ubicó de primero en la estación de las 7 Puertas en Haticos. “Ayer estuve rodando y no pude llenar. Fue un lunes catastrófico, había muchas cerradas y otras con colas”.
Alfredo Fernández, chofer de la ruta Sibucara- El Brillante, reclama el “desastre” para cargar gasolina en el punto de Socorro. “Se están colando, todos quieren cargar. No se sabe qué pasa con la gasolina”.
Una comisión de efectivos del Cuerpo de Policías del Estado Zulia custodiaba la seguridad ante las denuncias de hechos irregulares. Vigilaban entre los usuarios el orden. También militares se apostaban para controlar el turno de usuarios en Lagopista. La administración rechaza señalamientos de ventas de cupos o sobreprecios de cargas. “Aquí estamos trabajando con las colas y estamos vigilando todo”, soltó el personal.
Con información de La Verdad