CCD Varios miles de personas condenadas a muerte por tráfico de drogas en Irán escaparán a la pena de muerte, informaron el la prensa iraní tras promulgarse una nueva ley que castiga el narcotráfico con menos severidad.
El jefe del poder judicial, el ayatolá Sadegh Larijani, ha notificado “a la totalidad del poder judicial” el decreto de aplicación del texto votado por el Parlamento en agosto de 2017, afirma la agencia Mizanonline, dependente de la judicatura.
Según esta circular, los jueces deben “cesar inmediatamente la aplicación de la pena de muerte y volver a examinar los casos” de los condenados en cuestión.
”Esta ley retroactiva aclarará la situación de unos 5.000 presos condenados a muerte por tráfico de drogas y cuya sentencia aún no se ha aplicado”, escribe el periódico iraní. La mayoría de ellos debería ver sus penas “conmutadas a 25 a 30 años en prisión”, agrega el periódico.
En virtud de una enmienda a “actuar contra las drogas”, aprobada en agosto, la producción o la distribución de heroína, cocaína y anfetaminas ahora se castiga con la muerte si son más de dos kilos, no los 30 gramos anteriores. El umbral pasa de 5 a 50 kilos para el opio y la marihuana.
La pena capital se mantiene para los delincuentes a la cabeza de los cárteles de la droga, para aquellos que emplean menores en el tráfico o para el uso de armas de fuego.
La pena de muerte es también aplicable en Irán para los casos de violación, asesinato y apostasía.
Teherán no publica datos oficiales sobre ejecuciones. Según la Organización de Derechos Humanos Amnistía Internacional, en 2016, Irán ocupó el segundo lugar en el ranking mundial de los países con mayor aplicación de la pena capital por detrás de China: más de 567 ejecuciones tuvieron lugar (contra los 977 de 2015).
Con información de La Vanguardia