La plataforma digital InfoAmazonia investigó el alcance social, político, económico y ecológico del Arco Minero del Orinoco. A partir de este lunes está disponible el reportaje, elaborado en alianza con el Centro Pulitzer y con Correo del Caroní. La iniciativa de esta alianza ocurrió a partir de la cobertura de la masacre de Tumeremo y la impunidad con la que se ha desarrollado el motor minero, encendido por Maduro para alargar su permanencia en Miraflores.
Violencia, bandas armadas, oro, deforestación, trasnacionales, guerrilla, inflación, escasez de efectivo, malaria… este coctel tiene nombre: Arco Minero del Orinoco. Y estaría incompleto si no se sirviese con militares y con corrupción. No es una serie o una telenovela. Así pretende el régimen de Nicolás Maduro oxigenar las arcas nacionales, desde 2016, en su afán por permanecer en el poder.
“En cualquier momento podría ocurrir una balacera o una masacre”, relatan con naturalidad los mineros en El Callao.
El Arco Minero vino a institucionalizar la devastación ecológica y social en el sur de Venezuela. La caída de los precios petroleros en 2014, el fracaso en las políticas económicas (entre ellas, el motor minero) y la conflictividad política se han traducido en una nueva apuesta de Miraflores: la explotación minera en un territorio de más de 112 mil kilómetros cuadrados. En esta región, el mercurio y la sangre se mezclan. Así como la violencia, la anarquía y la impunidad. O las Fuerzas Armadas, la guerrilla, los indígenas y los locales.
No es solo el oro, el único commodity que concentra miradas; también el coltán y el diamante. Pese a la renacionalización minera, a finales de 2011 en manos de Chávez, Maduro optó en 2016 revertir la decisión de su padre político.
Paradoja de la riqueza
“El país se encuentra en una gran agitación política y financiera desde hace ya varios años, pero actualmente los niveles de hiperinflación y de escasez de productos básicos están llevando la economía a tocar fondo. El gobierno necesita soluciones concretas, por ello el anuncio de la apertura de una parte significativa del país a un nuevo motor de desarrollo económico: la minería”, sostiene Bram Ebus, periodista de investigación especializado en temas socioambientales, que pertenece a la plataforma digital InfoAmazonia.
Esta gran paradoja que cubre al Arco Minero, riquezas minerales y miseria, es definido por Clíver Alcalá como “desastre y en el botín”. El mayor general, fiel a Chávez, que comandó las regiones mineras fue entrevistado para este reportaje. Así como abogados, especialistas ambientales, sanitarios y en derechos humanos, miembros del PSUV.
Violencia minera y recelos medioambientales e indígenas funden motores del Arco Minero
La iniciativa del portal web InfoAmazonia nace a raíz de la cobertura de Correo del Caroní con la masacre de Tumeremo y la visibilización internacional que alcanzó. El puente institucional se dio en septiembre de 2016, en el Festival Gabo, que organiza los premios de Periodismo de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano.
Este reportaje fue posible también gracias al auspicio del Centro Pulitzer. La alianza incluye una decena de organizaciones que contribuyeron en el proceso de búsqueda, logística y publicación (entre ellas el portal web venezolano de periodismo de investigación, Armando.Info). Correo del Caroní colaboró con la investigación in situ, soporte documental, fotografías, edición y la traducción al castellano del reportaje.
Bram Ebus fue el periodista holandés detenido a mediados de septiembre mientras investigaba sobre el Arco Minero para este reportaje.
Pese a la trama, el Arco Minero no es una serie o una telenovela. Y el final de esta historia tampoco tendrá un final feliz. La hipoteca del país en lo social (violación de derechos humanos a indígenas y locales), en lo ecológico y en lo económico es evidente. Por eso la pertinencia periodística de la denuncia. En este enlace pueden acceder a los gráficos, a los mapas y al reportaje.
Con información de La Patilla