Unas 160 personas han sido detenidas en Italia y Alemania en una vasta operación contra la mafia calabresa, anunciaron este martes las autoridades italianas.
Se trata de un duro golpe contra la poderosa organización, con ramificaciones en sectores económicos claves en Italia y Alemania, la cual a través de la extorsión y las amenazas obligaba a empresarios, entre ellos dueños de restaurantes, pizzerías y panaderías a adquirir sus productos.
Entre los detenidos figura el presidente de la provincia de Crotone, Nicodemo Parrilla, así como varios gerentes y funcionarios locales.
En la lista también se encuentran varios jefes mafiosos que recibieron esta nueva orden de detención en tanto ya se encontraban detrás de las rejas.
Las autoridades decomisaron propiedades por valor de 50 millones de euros, según informaron los investigadores, coordinados por la Dirección Anti-Mafia de Catanzaro (sur de Italia).
La poderosa red operaba sobre todo en la región de Ciró Marina, en el extremo sur de Italia, donde se había infiltrado en sectores rentables como la producción de vino, aceite de oliva y harina, en general productos típicos, así como en la recogida y transformación de basuras, el servicio de pompas fúnebres y de lavandería profesional.
La organización era liderada desde la celda por Giuseppe Farao, un jefe mafioso de 70 años, quien cumple condena a cadena perpetua, pero que seguía transmitiendo instrucciones a sus hijos, nietos y asociados.
El lema de Farao ha sido el de «limitar el uso de acciones violentas así como los conflictos internos, porque perjudican los negocios», según explicaron en un comunicado los carabineros.
El clan Farao lavaba las ganancias en empresas comerciales de Nápoles, Toscana e incluso Alemania.
La policía alemana precisó que detuvo a 11 sospechosos de entre 36 y 61 años de edad, todos acusados de chantaje y lavado de dinero.
Según las autoridades italianas, contaba con células en Fráncfort, Wiesbaden, Múnich y Stuttgart, donde gracias a sus métodos logró el monopolio del suministro de vinos, quesos, aceites y salsas para pizza, entre otros.
Un centenar de arrestos en Italia y Alemania y propiedades por valor de 50 millones de euros colocadas en custodia.
Las encuestas llevadas a cabo bajo los auspicios de la Dirección antimafia en Catanzaro, Calabria, revelaron las fugas en sectores que van «del vino y la comida en la recolección de basura, servicios funerarios, licitaciones públicas, y que una estrecha red de connivencia por parte de los administradores públicos «, explicaron los carabineros en un comunicado.
La red tuvo ramificaciones en diferentes regiones italianas y hasta Hesse y Baden-Württemberg en Alemania, agregaron. Según los medios italianos, la «tenencia» criminal de la red también se benefició de la recepción de inmigrantes, el sector turístico y las máquinas tragamonedas, y unos diez alcaldes o representantes locales se encuentran entre los detenidos.