CCD El gobernador del Banco de Letonia, Ilmars Rimsevics, detenido ayer domingo, es sospechoso de haber solicitado y aceptado un soborno de al menos 100.000 euros, informó hoy el director de la Oficina para la Prevención y la Lucha contra la Corrupción (KNAB) del país báltico, Jekabs Straume.
En una comparecencia ante los medios, Straume señaló que Rimsevis se encuentra detenido en una prisión de Riga, la capital del país, aunque se espera que salga en libertad bajo fianza la tarde de este lunes.
El responsable de la oficina anticorrupción explicó que, además de a Rimsevics, se investiga a otra persona, cuyo nombre no hizo público, por haber presuntamente facilitado el soborno.
El gobernador fue detenido el domingo por agentes de la KNAB en el aeropuerto de Riga tras regresar al país de un viaje al extranjero, después de que en días previos fueran registradas sus oficinas en la entidad financiera y su residencia en las afueras de la capital.
Una vez acusado de un delito, la KNAB es la responsable de fijar los términos de su puesta en libertad o su permanencia en prisión y el abogado de Rimsevics reveló a los periodistas que se había fijado una fianza que ya se había abonado -100.000 euros facilitados por un «amigo», según medios locales-.
El primer ministro letón, Maris Kucinskis, señaló en declaraciones a medios locales que la KNAB pedirá la suspensión de Rimsevics como responsable del banco central.
La ministra de Finanzas, Dana Reizniece-Ozola, ya pidió ayer la renuncia de Rimsevics, al considerar que su permanencia en el cargo estaba dañando la reputación de Letonia en los mercados internacionales.
Según apuntó, la detención del gobernador y las acusaciones de las autoridades de EEUU contra el segundo banco del país, el ABLV, por presunto lavado de dinero habían forzado al país a alterar planes para refinanciar deuda nacional, aunque no especificó cuáles.
ABLV niega las acusaciones de Washington, pero el Banco Central Europeo (BCE) informó hoy de que ha impuesto una moratoria a la entidad por la que se prohíben todos sus pagos, tras el «significativo deterioro» de su posición financiera después de que EEUU le acusase de mantener negocios con Corea del Norte.
El primer ministro letón explicó a los periodistas que, según la oficina anticorrupción nacional, el caso de Rimsevics no está relacionado con los escándalos que rodean al ABLV, implicado también en el pago de presuntos sobornos a autoridades letonas, de acuerdo con las acusaciones estadounidenses.
Rimsevics ha dirigido el Banco de Letonia desde 2001 y fue reelegido para el puesto en 2007 y en 2013 por los cien miembros del Parlamento, la Saeima, la institución encargada de nombrar al gobernador y la única que puede cesarlo, por delitos graves, antes de que acabe su mandato en 2019.
Rimsevics es uno de los cargos públicos mejor pagados en Letonia, con un sueldo bruto anual de alrededor de 150.000 euros.
Antes de la crisis financiera de 2008 el salario alcanzaba los 170.000 euros y, en el debate público sobre sus emolumentos, se defendió la necesidad de que el gobernador del banco central tuviera independencia financiera para evitar influencias externas.