CCD Unos 145.000 venezolanos han buscado protección internacional entre 2014 y principios de marzo de 2018, principalmente en las Américas, lo que supone un aumento del 2.000 %, informó hoy la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
La portavoz de ACNUR Aikatarina Kitidi señaló en rueda de prensa que «sabemos que cada día más y más venezolanos abandonan su país».
«Se cree que más de 1,5 millones de venezolanos viven actualmente fuera de su país, según estimaciones gubernamentales conservadoras, lo que significa que las Américas enfrentan uno de los mayores flujos de salida de la población desde la creación de ACNUR en 1950», indicó Kitidi, informó EFE.
Los venezolanos abandonan su país por la situación política y socio-económica compleja que vive Venezuela, lo que incluye la inseguridad y la violencia, y la falta de alimentos, de medicamentos o de acceso a servicios sociales esenciales, así como la pérdida de ingresos.
La portavoz explicó que una importante proporción de los que dejan Venezuela «necesitan protección internacional», por lo que ACNUR ha publicado una nota de orientación en la que pide a los países susceptibles de recibir a venezolanos, así como a aquellos que ya los acogen, a permitir el acceso y a otorgarles protección.
Según cifras gubernamentales, «más de 145.000 venezolanos han iniciado solicitudes para conseguir el estatus de refugiados desde 2014 y hasta el 7 de marzo», indicó Kitidi.
Más del 94 % buscó el reconocimiento del estatus de refugiado en 2017 solamente y la mayoría lo hizo en las Américas, explicó.
De acuerdo con ACNUR, el aumento del número de venezolanos que buscan asilo en el mundo desde 2014 ha aumentado un 2.000 %.
Por años, en 2014 hubo 4.040 solicitantes de asilo, en 2015 10.168, en 2016 34.183 y en 2017 94.284.
El resto, en torno a 3.864 lo hizo en lo que va de año.
«Esto es un llamamiento a la reciprocidad y la solidaridad en las Américas para con los venezolanos», señaló la portavoz.
«Sabemos que muchos países tienen una política muy hospitalaria y han estado abriendo sus fronteras a los venezolanos, recibiéndolos», añadió Kitidi.
La portavoz de ACNUR señaló no obstante que «cientos de miles de venezolanos no tienen documentación o permiso» para quedarse legalmente en otros países, «lo que les convierte en particularmente vulnerable a la explotación, el tráfico humano, la violencia, el abuso sexual, la discriminación y la xenofobia».
La agencia de la ONU pide a los países que acogen a venezolanos que adopten medidas alternativas para permitir su permanencia legal, incluida la emisión de visados o permisos de residencia temporales y otros programas de regularización para que puedan acceder a derechos básicos, como el cuidado médico, la educación, la reunión familiar, la libertad de movimiento, una vivienda y un trabajo.
«A la vista de la situación en Venezuela, es esencial que las personas no sean deportadas o devueltas forzosamente», dijo Kitidi.
ACNUR ha desarrollado un plan regional de respuesta que requiere 46 millones de dólares y que cubre ocho países en América Latina y el Caribe, entre los que figuran Brasil, Costa Rica, México, Ecuador, Panamá, Perú, Colombia, Trinidad y Tobago, Guayana.
«Estamos preparados para asistir a las autoridades en el caso de que aumenten los números de venezolanos que huyen. Estar preparados es una de las principales actividades de ACNUR. Tenemos tanto equipos en la sede listos a ser desplegados como en la región», precisó la portavoz.