CCD El escándalo de corrupción de Odebrecht ha estremecido la política latinoamericana, provocando una ola de investigaciones y procesos judiciales en los que están involucrados mandatarios en ejercicio, ex presidentes y ministros. Todos los gobiernos de la región envueltos en esta trama se han visto impactados por este hecho. Este no es el caso de Venezuela, que ha engavetado las pesquisas e investigaciones que comenzaron a principios de 2017 y silenciado a la opinión pública venezolana. Hasta mayo de 2018 no hay sancionados ni exonerados.
Las confesiones hechas por los directivos de Odebrecht señalan que, fuera de Brasil, Venezuela es el país donde la compañía pagó la suma más alta de sobornos para obtener contratos. Gracias a la estrecha relación política que mantenían Caracas y Brasilia, las administraciones de los presidentes Hugo Chávez y Nicolás Maduro pusieron en manos de la compañía brasileña obras de gran envergadura, que demandaban inversiones de miles de millones de dólares. Pero las 11 obras más grandes quedaron inconclusas.
Transparencia Venezuela identificó un total de 33 obras y 40 contratos suscritos entre algunos ministerios, o entes adscritos a ellos y, Odebrecht, pero solo conseguimos copia de 9 contratos, e información importante sobre 18.
La cantidad y dimensiones de las obras contratadas en Venezuela, el número de contratos suscritos y la estrecha relación ideológica, estratégica y personal entre los presidentes Chávez y Lula Da Silva, no tienen comparación con ningún otro país, salvo con Brasil. Tenemos conocimiento que durante el gobierno de Hugo Chávez, es decir, entre 1999 y 2012, se firmaron 36 contratos y en 2013 ya con Nicolás Maduro en la Presidencia, se firmaron cuatro nuevos contratos.
El caso venezolano destaca también por la opacidad sobre los contratos, pagos, condiciones, avances y el silencio e inacción del sistema de administración de justicia.
Gobiernos y fiscalías de distintas naciones latinoamericanas han decidido promover averiguaciones y castigos contra los involucrados en el desfalco. En contraste, el Estado venezolano no ha tomado ni una sola medida concreta contra los culpables del saqueo de las arcas públicas y valiéndose del control que ejerce sobre el sistema judicial, ha bloqueado las investigaciones.
En su lucha contra la opacidad, la impunidad y la corrupción, Transparencia Venezuela resolvió alzar su voz para denunciar las irregularidades cometidas por Odebrecht en concierto con los funcionarios venezolanos. Durante cinco años, un equipo de especialistas creado por la organización, se ha dedicado a desentrañar uno de los peores casos de corrupción de la historia del continente, presentando cientos de solicitudes de información, revisando gacetas oficiales, analizando informes de gestión de entes públicos, registrando contratos y siguiendo investigaciones de periodistas y demandas judiciales.
El sitio Odebrecht en la web transparencia.org.ve concentra la información recabada hasta el momento en el marco de este esfuerzo. Aún quedan muchos datos por precisar y la investigación continúa. Nuestra organización convoca a todos los ciudadanos para que se involucren en esta iniciativa no solo para ayudar a su difusión, sino para ofrecer información verificable que permita profundizar las averiguaciones y señalar a los responsables.
En este informe estamos poniendo a disposición del mundo la información obtenida en dos formatos: copia escaneada de los contratos a los que tuvimos acceso y cuadros analizados, con el siguiente contenido: los listados de las obras y los contratos descubiertos hasta ahora; el avance físico de cada obra de acuerdo a datos oficiales; el comparado entre los pagos efectuados y el avance físico de las obras registrados hasta abril 2017; el monto de cada contrato al inicio y algunos de sus incrementos; el listado de responsables de los contratos por ministerio o ente adscrito y Odebrecht; el total de los montos de los contratos comparados con los pagos que hemos comprobado; la información de los pagos de los contratos realizados por anticipo y otros pagos y, finalmente, algunos créditos adicionales que se aprobaron para el pago de la obras asignadas a Odebrecht.
La corrupción le hace mucho daño al país, afecta la calidad de vida de los venezolanos y desvía recursos que deberían destinarse a atender la crisis humanitaria por la que atraviesa la República. La opacidad y la desidia son las mejores aliadas de los corruptos. Ya basta de silencios. Para los ciudadanos, llegó la hora de actuar.
* Transparencia Venezuela, capítulo nacional de Transparencia Internacional, es una asociación civil sin fines de lucro, no partidista, plural y sin filiación política, dedicada a promover condiciones, procedimientos y factores para prevenir y disminuir la corrupción.
Con información de La Patilla