CCD | Un equipo del ganador de las elecciones presidenciales de México, Andrés Manuel López Obrador, presentó el viernes su propuesta para pacificar el país sin disparar más balas, en momentos en que la nación se encuentra sumida en una espiral de violencia alimentada por el narcotráfico.
El grupo, encabezado por la exministra de la corte Olga Sánchez, quien además sería la próxima secretaria de Gobernación (Interior), dijo a Reuters -antes del encuentro con la prensa para dar detalles- que el plan se enmarca dentro de un programa integral de justicia transicional.
La propuesta incluye no sólo una polémica ley de amnistía para perdonar a los bajos rangos del mundo criminal, sino además una ley personalizada de reducción de condenas para quienes den información que permita capturar a los capos y despenalización de marihuana y la amapola, planta de la cual se extrae la goma de opio para la elaboración de la heroína que inunda Estados Unidos.
“No sólo va a ser amnistía, va a ser una ley de reducción de penas, vamos a proponer la despenalización, crear comisiones de la verdad, vamos a atacar las causas de la pobreza, vamos a darle becas a los chicos y vamos a trabajar en el campo para poderlos sacar del tema de la droga”, dijo Sánchez, una jurista de 63 años.
En 2006, ante la enraizada corrupción de las corporaciones policíacas, el entonces presidente Felipe Calderón ordenó al ejército salir a las calles a combatir la delincuencia que lejos de contenerse, tras 12 años de combate, se ha fragmentado, fortalecido y diversificado dejando unos 160,000 muertos y decenas de miles de desaparecidos.
El izquierdista López Obrador, conocido como AMLO y quien asumirá la presidencia el 1 de diciembre tras arrasar en las presidenciales del domingo, ha propuesto un enfoque distinto para acabar con una guerra que le hizo perder al país un 21 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB) el año pasado, según cálculos privados.
El equipo de seguridad detalló más tarde el viernes a la prensa que el plan, que se echaría andar de inmediato, incluye además dar un nuevo enfoque a la seguridad como, por ejemplo, frenar el creciente tráfico de armas en el país así como el flujo de efectivo ilícito.
El designado como secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, dijo por su parte que se está proponiendo modificar la operación de los filtros de seguridad para frenar el tráfico de armas, ya que actualmente solo se aplican en la frontera norte del país, y combatir la corrupción en aduanas, puertos y aeropuertos.
El futuro secretario agregó que pretenden adoptar una etapa más “sofisticada apoyados en tecnología avanzada”, así como “incrementar la eficacia de estos mecanismos de revisión”.
El proyecto, que tendría que ser aprobado antes por el Congreso, donde Morena tiene la mayoría, se llevaría inicialmente a consulta pública que incluirá a víctimas de violencia y población de zonas con altos índices de violencia, agregó.
ATACANDO LAS CAUSAS
En 1940, durante el último año de su gobierno, el presidente Lázaro Cárdenas despenalizó las drogas, autorizó a los médicos a recetar narcóticos a los adictos, abrió ambulatorios para ayudarlos y propuso tratarlos como enfermos, no como criminales.
La compra de pequeñas cantidades de marihuana, cocaína y heroína fue despenalizada y su venta monopolizada por el Estado. Los delincuentes a pequeña escala fueron liberados de las cárceles y de las clínicas de adicción.
Sin embargo, antes de que la norma cumpliera seis meses, en medio de una escasez de cocaína y morfina debido a la Segunda Guerra Mundial, la ley fue cancelada y engavetada. Sánchez dijo que algo similar podría implementarse una vez asuman el poder.
“(Se podría parecer) mucho a lo que hizo Lázaro Cárdenas en 1940”, dijo.
AMLO considera que la violencia tiene su origen en la pobreza, desigualdad y falta de oportunidades de los campesinos que se dedican a cultivar o transportar marihuana y amapola. Por ello, explicó Sánchez, su plan para acabar con la violencia incluye un fuerte contenido social.
Sánchez dijo que el plan se trabajará con organismos internacionales como Naciones Unidas, las diversas iglesias, incluida la Católica, y la sociedad civil.
“Quiénes podrían ser sujetos -a la amnistía-: niños, niñas, jóvenes cooptados por el crimen organizado (…) en el caso de las mujeres que cometen delitos ‘por amor’, que por apoyar a su pareja llevan droga, armas, etc. (…) Esto sería a grandes rasgos los sujetos que contemplamos”, precisó.
Fuente: Reuters