La magia de Maduro hizo desaparecer la inmensa deuda del pequeño país caribeño, que no produce casi nada. Tras regresar a Venezuela de uno de sus acostumbrados viaje a la isla para hacer «consultas» a los jerarcas cubanos. Y para completar Venezuela quedó debiendo dinero a Cuba.
El régimen de Cuba acumuló durante largos años una deuda con Venezuela que alcanzó unos tres mil millones de dólares. Préstamos hechos por instituciones financieras venezolanas como el Tesoro Nacional, Fonden y Bandes concretaron la deuda.
El trabajo de investigación realizado para Primer Informe por el periodista especializado en el tema Casto Ocanto así lo determinó. Según el Punto de Cuenta 045-16 de cinco páginas propuesto por Delsy Rodríguez cuando era Canciller del régimen, y firmado por Maduro. La deuda cubana resultó borrada de un plumazo por “compensación” con supuestas deudas que Venezuela tenía con Cuba. La compensación no sólo perdonó $3 mil millones que Cuba ya había gastado, sino que incluyó una línea de crédito de $177 millones a favor de La Habana. La deuda de Venezuela era mayor.
Acuerdos con Raúl Castro
El documento, obtenido en exclusiva por Primer Informe detalla que Maduro lo firmó a mediados de 2016, después de llegar de un viaje a La Habana para firmar nuevos acuerdos con Raúl Castro.
La deuda cubana desapareció de la contabilidad de los organismos como Fonden, Corpoelec, Cantv, Pdvsa y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), entre otros. Y según fiscales que investigaron el caso, las facturas y comprobantes de los productos vendidos y los servicios presuntamente prestados por los cubanos incluidos en el Punto de Cuenta, no aparecen o se mantienen en secreto.
Según el documento, la deuda total de Cuba con Venezuela era de $3,008 millones. Incluyó varios créditos con Fonden, pagarés del Banco Central de Cuba para la Oficina Nacional del Tesoro, depósitos hechos por Pdvsa en el Banco Internacional de Comercio S.A., de Cuba, entre otros aspectos.
Desaparición del documento
En contraste, la deuda de Venezuela con Cuba, supuestamente, ascendía a $3,186 millones, un total de $177 por encima de la deuda cubana. Abarcaba una amplia variedad de productos y servicios prestados hasta el 2015. Incluía materia prima que la isla no produce, y sorprende también la aparición de “deudas de la IV República“.
El documento se mantuvo secreto hasta que un alto ejecutivo de Pdvsa lo filtro a Primer Informe porque estaba en contra de la operación. Ni el alto ejecutivo ni uno de los fiscales que inició las indagaciones de forma confidencial, encontraron recibos, facturas o comprobantes de los servicios supuestamente descritos en el Punto de Cuenta.
