El presidente Trump firmó el miércoles una proclama que prohíbe el ingreso a EEUU de militares y altos funcionarios del régimen de Maduro, así como de sus familiares, como parte de sus esfuerzos por ayudar a restaurar la democracia venezolana.
La medida afecta a funcionarios del régimen con nivel de ministro y vice ministros, así como cargos equivalentes, y a oficiales de las fuerzas armadas y de la policía con rango de coronel hacia arriba.
«He determinado que está dentro de los intereses de Estados Unidos actuar para restringir y suspender el ingreso a los Estados Unidos, como inmigrantes o no inmigrantes, de altos integrantes del régimen de Nicolás Maduro», declaró Trump.
Añadió que la suspensión no pretende ser aplicada a quienes dejan de sostener al régimen y tomen pasos concretos para ayudar a Venezuela a recuperar la democracia.
La proclama también prohíbe el ingreso de los integrantes de la cuestionada Asamblea Nacional Constituyente, así como cualquier persona que «actúe en nombre o en respaldo de los esfuerzos del régimen por mermar las instituciones democráticas de Venezuela o impedir la restauración del gobierno constitucional de Venezuela».
La medida también afecta a extranjeros que obtengan «significativos beneficios financieros de todas las transacciones u operaciones de negocios con esas personas».
EEUU es uno de las más de 50 naciones que desconocen la autoridad de Maduro y reconocen al presidente interino Juan Guaidó como el legítimo presidente de Venezuela.
El Departamento del Tesoro lleva más de un año aplicando duras sanciones contra el régimen bolivariano de Caracas y previamente había suspendido las visas de varios de sus funcionarios. La proclama del miércoles amplía el número de suspensiones.