Al menos tres mujeres y seis niños de una comunidad mormona estadounidense asentada en el norte de México desde hace más de un siglo murieron en un ataque lanzado por presuntos criminales, dijo Julián Lebarón, uno de los líderes del grupo religioso. Así lo informó AFP.
Lebarón, activista que ha denunciado a grupos criminales que actúan en la zona, señaló que el ataque ocurrió en Rancho de la Mora, en el límite de los norteños estados de Sonora y Chihuahua, fronterizos con Estados Unidos.
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«Mi prima Rhonita iba por su esposo al aeropuerto en Phoenix (Estados Unidos). Los emboscaron, le dispararon a la camioneta y los quemaron a ella y a sus cuatro niños…Fue una masacre».
El activista aseguró que sus familiares localizaron la camioneta en el lugar del ataque prácticamente del todo calcinada y con los cuerpos de la mujer y los cuatro menores.
Los atacantes secuestraron además dos camionetas que eran conducidas cada una por mujeres que llevaban consigo a menores de edad para sumar entre 8 y 9 nueve niños, según el relato.
Horas después, localizaron los otros dos vehículos con las mujeres que los conducían muertas por heridas de bala, además de dos menores, un niño y una niña, también fallecidos.
Entre cinco y seis menores más consiguieron llegar caminando a su casa, aunque uno de ellos con herida de bala, mientras que al caer la noche miembros de la comunidad mormona acompañados de policías y militares trataban de localizar a otra menor que habría corrido al bosque para esconderse.
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Interrogado sobre quiénes podrían ser los agresores, Lebarón dijo que el sitio donde se produjo el ataque es una «zona de guerra» donde actúan cárteles de las drogas y todo tipo de «matones».
Según medios mexicanos, los mormones han pedido la ayuda de la embajada de Estados Unidos ya que la mayoría de la comunidad tendría la doble nacionalidad, mexicana y estadounidense.
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