Con la sentencia del 13 de noviembre de 2019, el Tribunal de Primera Instancia de Curaçao reconfirmó la quiebra del Banco del Orinoco (BDO). El recurso de apelación de Víctor Vargas fue rechazado por el Tribunal General.
Informe Curazao: La quiebra del BDO y la complicidad de los reguladores
A petición del Banco Central de Curazao y Sint Maarten (CBCS), la medida de emergencia se pronunció contra BDO el 5 de septiembre de 2019. El Tribunal de Primera Instancia asumió que BDO utilizó documentos falsificados para «corroborar su posición financiera» y, por lo tanto, consideró que las serias dudas de CBCS al respecto estaban justificadas. Durante la medida, CBCS descubrió que la posición financiera de BDO era deplorable. El Banco Central de Curazao ha determinado que la continuación de la regulación de emergencia ya no tiene un propósito.
En la sentencia de hace dos días, el Tribunal anunció que las deudas de BDO ascienden a aproximadamente los 900 millones de dólares. En el contexto de la decisión, no se demostró que el Banco del Orinoco N.V. posea activos sustanciales. Según el Tribunal, CBCS tenía razón al considerar que BDO tenía un patrimonio neto negativo. La Fiscalía considera que CBCS tenía razón en considerar que no se pudo lograr el propósito de la medida de emergencia. El fallo de quiebra de la entidad financiera, por lo tanto, permanece plenamente intacto.
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