El juez federal de Córdoba (Argentina) Miguel Vaca Narvaja, denegó el pedido de la justicia de Andorra para extraditar al ex directivo de PDVSA Luis Abraham Benito Bastidas Ramírez (43 años), detenido en esa provincia y acusado de lavar más de 5 millones de dólares. Ramírez fue arrestado en 2018, pero permanece en libertad. Sin embargo, el procurador general de la Nación, Eduardo Casal, apeló la decisión de Vaca Narvaja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Con información del Clarín.
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El caso de Ramírez se suma a la valija de Antonini Wilson con 800 mil dólares, la denuncia del ex directivo de PDVSA Argentina Gonzalo Brusa Dovat según la cual habría habido maniobras financieras en la sucursal local, y la detención en enero pasado de la ciudadana boliviana María Palacios tratando de cruzar la frontera de Bolivia a Argentina con 100 mil dólares que no estaban declarados.
El juez denegó el pedido de extradición por “defectos formales”. En su fallo, justificó la suspensión al señalar que el pedido de extradición no cumplía con algunos requisitos. Y solicitó que en 30 días la Justicia andorreña le enviara una descripción clara de las acusaciones contra Ramírez y la resolución judicial con los motivos de los supuestos ilícitos por los que pedía la extradición, entre otros aspectos. A través de la Cancillería, la Justicia de Andorra fue notificada sobre la solicitud de información adicional.
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Vencido el plazo establecido por Vaca Narvaja, el Principado no hizo la presentación, por lo que el juez cordobés rechazó la extradición por “defectos formales”.
Sin embargo, la fiscal Graciela López de Filoñuk cuestionó el fallo del magistrado por haber “desoído -sin fundamento valedero– el reclamo de extradición”, aun “previendo las consecuencias internacionales que dicha decisión puede acarrear”.
La Justicia de Andorra, el 12 de julio de 2018 ordenó su detención por el “delito mayor continuado de blanqueo de dinero proveniente de la corrupción pública”, previsto en los artículos 409 y 410 del Código Penal de ese país, que prevé una pena de cinco a ocho años de prisión.
Ramírez es primo de Rafael Ramírez Carreño, quien entre 2004 y 2013 fue presidente de la petrolera estatal venezolana PDVSA. Según consta en la notificación de Interpol, para la Justicia andorreña Bastidas Ramírez posee “importantes vínculos con PDVSA y el sector enérgico de su país”. Las sospechas que se ciernen sobre él es haber ingresado al sistema financiero unos 5 millones de dólares provenientes de la corrupción pública a través de una cuenta abierta en la Banca Privada de Andorra (BPA), mientras fungía como gerente.