Los dueños de ambulancias quieren hacer su agosto en mayo. De acuerdo a lo denunciado por familiares de pacientes hospitalizados en el Antonio María Pineda (Barquisimeto) estas unidades de traslado están ajustando semanalmente el precio del servicio. No importa si el recorrido es corto o largo pues todos son tasados en dólares con montos que van desde los 35 a los 50 billetes verdes (dependiendo de la hora) y de 75 a 100 dólares si el servicio se presta en una unidad UCI. Con información de La Prensa de Lara.
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Marcos Blanco, mecánico, que tiene a su padre hospitalizado en el cuarto piso del Hospital Central de Barquisimeto, relata que, en menos de dos semanas los traslados pasaron de costar 20 a 35 dólares. La razón es desconocida pues, en teoría, estas unidades son surtidas con gasolina de forma regular.
«Se están aprovechando de la necesidad de las personas. Ahora hay menos ambulancias que antes y las que están operativas quieren desangrar a uno», relataba el señor Blanco.
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Los familiares de pacientes explican que dentro del Hospital Central no hay ambulancias del sector público. La institución no tiene laboratorios ni tomógrafos así que, cada vez que hay que hacer una prueba especializada, deben salir y pagar por una unidad de traslado.
«Lo que más indigna es el descaro que tienen. El costo que tiene hoy el traslado es distinto al de mañana. No importa si es el mismo chofer y la misma distancia, el precio lo suben a lo bravo», relataba la señora Ana de Castro, mujer que tiene a su esposo internado en la Emergencia del Hospital Central.
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Algunos choferes de ambulancia señalaron que, aunque no compran gasolina bachaqueada, pagar cauchos o repuestos les cuesta un ojo de la cara. «Mantener estos carros cuesta mucho dinero».
Como no todos pueden pagar una ambulancia es normal ver a pacientes que son bajados de camionetas con un riesgo inminente. En camionetas, camiones, sillas o incluso cargados.
