La Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional de España ha dado otra tregua al general chavista Hugo Carvajal, que se encuentra en prisión provisional en la cárcel de Estremera desde el pasado mes de septiembre en espera de extradición a Estados Unidos. La entrega vuelve a pararse hasta que se resuelva su segunda y última petición de asilo. Con información de Isabel Vega / ABC.
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En una providencia a la que tuvo acceso ABC, el tribunal que preside Alfonso Guevara da cuenta de que ha recibido «dos correos electrónicos de la Oficina de Asilo con fecha 17 de diciembre» en relación a la última solicitud de protección internacional instada por el general. Acuerda «estar a la espera de la resolución administrativa correspondiente».
Esta es la segunda vez que Carvajal pide asilo en España.
Lo hizo hace unas semanas, ante la noticia de que la Audiencia Nacional había completado todos los trámites para proceder a su extradición y en concreto, el intercambio de garantías con Estados Unidos por el que aquel país se comprometía a no enjuiciarle por delitos fuera de la reclamación y aseguraba que en caso de ser condenado a cadena perpetua, tendría acceso a un recurso.
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La primera vez que solicitó asilo, en mayo de 2020, la petición fue desestimada por falta de acreditación de la persecución política que alegaba en Venezuela. En esta segunda ocasión ha añadido más detalles al relato y hechos que se han producido en los últimos meses, como la detención en un aeropuerto del primo de su mujer y la cuidadora de sus hijos acusados de graves delitos de terrorismo, según el entorno de Carvajal, por un montaje.
Paralizado tres veces
Cuando en noviembre de 2020 el general supo por la prensa que le iban a extraditar y se puso en fuga, aún no sabía qué había ocurrido con la petición de asilo. Se enteraría después, ya detenido y de vuelta a la prisión provisional el pasado septiembre y recurrió aquella negativa. La Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional acordó entonces parar máquinas en el proceso de extradición y esperar a que la Oficina de Asilo resolviese su recurso.
Esa decisión fue de nuevo negativa y aunque al general le quedaba un recurso de revisión extraordinario, el proceso de extradición se reanudó. Sin embargo, no podía materializarse porque faltaba un trámite por cumplimentar: las llamadas garantías. Se trata del compromiso que adquiere en este caso EEUU de asumir las condiciones que pone la Audiencia Nacional para la entrega. En concreto, que no será juzgado por hechos que no estén en la orden de extradición y que si le cae la perpetua, tendrá acceso a un recurso.
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Una vez cumplimentado este trámite, la Audiencia Nacional reanudó todo el proceso, hasta ahora. Cuando ha tenido conocimiento formalmente de parte de la Oficina de Asilo y Refugio sobre esa nueva petición de asilo de Carvajal que aún no se ha resuelto. De nuevo, decide esperar. Y cuando la Administración se pronuncie, se verá. Es plausible así que acabe pasando las Navidades en España. Eso sí, en prisión provisional. El mismo tribunal ya denegó su salida, habida cuenta de los casi dos años que estuvo en fuga.
