En un impactante reportaje publicado por Runrunes, basado en el libro Periferias: crónicas del Ecuador invisible, de la Fundación Periodistas Sin Cadenas (FPSC), se desvela la oscura travesía del Tren de Aragua, una de las bandas criminales más peligrosas de Venezuela, que ha llevado sus operaciones más allá de las fronteras nacionales y ha marcado un preocupante rastro en América del Sur.
La temida agrupación criminal ha ampliado su alcance a toda velocidad, abriendo rutas en Colombia, Perú, Brasil, Chile y, más recientemente, Ecuador. Aunque este último país se había mantenido a salvo de sus actividades, el reportaje señala que a finales de 2020, la policía ecuatoriana desarticuló un grupo criminal en una localidad fronteriza con Colombia. A pesar de las negativas oficiales, el reportaje detalla cómo el Tren de Aragua ha incluido a Ecuador en su lista de territorios donde extiende sus operaciones.
La banda Tren de Aragua extorsiona a migrantes que pasan por Cúcuta
Las autoridades ecuatorianas inicialmente negaron la presencia de la banda, pero desde el 2020, los trabajadores del terminal de Tulcán empezaron a denunciar la presencia de los criminales, quienes eran dirigidos desde cárceles venezolanas. Estos delincuentes extorsionaban a los trabajadores, forzándolos a pagar vacunas bajo amenazas. Aunque algunos intentaron minimizar la situación, las pruebas recopiladas en el reportaje de Runrunes dejan claro que el peligroso grupo ha infiltrado Ecuador con su accionar delictivo.
Incluso se señala a la reconocida modelo venezolana Jimena Araya, cuyas presentaciones en los mismos países donde se reporta la presencia del grupo, han suscitado preocupaciones debido a sus supuestos nexos con esta megabanda.
La alarmante realidad descrita en el reportaje exige una atención inmediata. El Tren de Aragua no solo representa un grave peligro para Venezuela, sino que su expansión por América del Sur pone en riesgo la seguridad de toda la región.
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