Con la creciente influencia de los criptoactivos en el panorama financiero global, surge una pregunta común: ¿Cuál es la diferencia entre Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH) y las monedas digitales convencionales? Con información de Mitsloanreview.
Según Silvia Singer, directora general del Museo Interactivo de Economía (Mide), comprender las características distintivas de estos activos es esencial para que los entusiastas del mercado cripto evalúen los riesgos asociados con sus inversiones en un sistema financiero descentralizado.
Hoy en día, el dinero digital ya es una realidad para la mayoría, con transacciones en tiempo real y pagos por productos y servicios a través de aplicaciones bancarias. Sin embargo, Singer hace hincapié en que la desaparición gradual del dinero físico no lo convierte automáticamente en un criptoactivo, ya que el dinero convencional está respaldado por autoridades financieras y la confianza en un acuerdo social.
Por otro lado, los criptoactivos son activos con valor generado de forma privada y negociados en un mercado sin regulación por parte de ninguna entidad central. Esto los hace notoriamente volátiles, como demuestran los datos de CoinMarketCap, que registraron fluctuaciones sustanciales en el valor del Bitcoin en un solo día.
Invertir en criptomonedas implica una montaña rusa de precios debido a la falta de respaldo oficial. Por eso, Singer aconseja no considerarlas como dinero en el sentido tradicional.
Antes de aventurarse en el mundo de las criptomonedas, Singer sugiere una autoevaluación y una comprensión básica del funcionamiento del sistema financiero. Solo entonces, un futuro inversor puede definirse a sí mismo con confianza en este emocionante pero volátil universo financiero.
