En el corazón del estado Bolívar, al sur de Venezuela, surge una historia que se teje en torno a la Corporación Berakah, C.A. Fundada en el año 2017 por Julio Ernesto Mendoza Delgado, esta empresa minera ha capturado la atención al convertirse en la primera compañía de su tipo en emitir papeles comerciales en la Bolsa de Valores de Caracas (BVC). Pero lo que realmente ha generado interés es la incógnita de sus «padrinos mágicos», que la han mantenido en un estado de aparente intocabilidad, evadiendo fiscalizaciones. Con información de Armando Info.
Desde sus primeros días, Berakah ha sido elogiada en las reseñas oficiales del Ministerio de Desarrollo Minero Ecológico y la CVM, resaltando sus proyecciones de producción de oro y presentándola como una aliada en labores altruistas, como la entrega de medicinas en ambulatorios del sur de Bolívar.
Sin embargo, detrás del brillo de los lingotes de oro, se encuentran sombras. Existente una lista de empresas, registradas a nombre de Mendoza, cuyas sedes son inexistentes. Además, se han hecho inversiones millonarias en dólares en un momento en que esta moneda estaba criminalizada por el régimen de Nicolás Maduro. Todo esto sin mencionar los problemas técnicos que han surgido, según fuentes consultadas por Armando.info.
La historia de Berakah es una parábola de un joven audaz que, bajo el aplauso del régimen, construye una estructura con inversiones millonarias en dólares sin garantías claras de retorno de ganancias. En resumen, es una historia en la que no todo brilla como el oro.
En febrero de 2017, Mendoza, con 30 años en ese momento, y Katerin Yuliet Ribeiro, de 26, constituyeron Corporación Berakah, C.A., con el objetivo de explorar y explotar minerales como oro, cobre, hierro, coltán y diamante. La distribución accionaria se mantiene inalterada, con un 90% para Mendoza y un 10% para Ribeiro.
En ese momento, la empresa adoptó el dólar como moneda funcional, desafiando abiertamente la política gubernamental que criminalizaba su uso. También se menciona la contratación de Construcciones Doble AA para la construcción de la Planta Berakah, un proyecto en el Fundo Moriche, que tiene vínculos familiares con Julio Mendoza y su padre, Alexis Mendoza.
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