Esta mañana, el Boeing 747-300 de Conviasa, registrado como YV3531, aterrizó en Florida tras ser decomisado por la Justicia estadounidense. El avión, vinculado a violaciones de sanciones internacionales y operaciones con organizaciones terroristas, partió desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza en Buenos Aires, sobrevolando Chile, Perú, Ecuador, Colombia y algunas islas del Caribe.
El régimen de Nicolás Maduro previamente advirtió que se trataba de un vuelo ilegal, declarando que el país que permitiera su paso sería «partícipe del robo» de la aeronave. Al llegar a Estados Unidos, el avión aterrizó en el Aeropuerto de Capacitación y Transición de Dade-Collier, ubicado a 36 millas al oeste de Miami.
Boeing 747 de Conviasa en Argentina: Paso decisivo rumbo al decomiso internacional
El avión, perteneciente a Mahan Air antes de ser transferido a Conviasa, estuvo retenido en Argentina desde junio de 2022. Despertó sospechas al llegar con 19 personas a bordo, desencadenando una investigación por presuntos vínculos con organizaciones terroristas.
Mahan Air, aerolínea sancionada por Estados Unidos, anterior dueña de la aeronave, fue acusada de transportar armas y recursos para Hezbollah y las Fuerzas Quds iraníes. La Justicia estadounidense ordenó el decomiso debido a violaciones de leyes de control de exportaciones, relacionadas con la transferencia no autorizada del avión a Conviasa.
Mahan Air y Qeshm Fars Air fueron designadas por brindar apoyo material a las Fuerzas Quds de Irán, mientras que Conviasa fue designada por la OFAC en 2020 y su flota bloqueada conforme a una Orden Ejecutiva en 2019.
