El Criadero San Antonio Abad, un zoocriadero privado aliado del Ministerio de Ecosocialismo, ha sido objeto de una investigación de la Fiscalía General por contrabando de fauna silvestre. A pesar de ello, la empresa ha continuado exportando toneladas de especies en peligro de extinción y ha importado animales extranjeros, como leones blancos. Un video divulgado por el exdiputado chavista Adel El Zabayar mostró decenas de guacamayas y tucanes enjaulados en un galpón ubicado en la carretera Petare-Guarenas. Esta denuncia llevó al fiscal general del régimen Tarek William Saab a anunciar una investigación por contrabando de fauna silvestre. Con información de Armando Info.
Sin embargo, a pesar de esta denuncia pública, la Fiscalía no ha revelado el avance de la investigación ni ha detenido las operaciones del criadero. Durante una inspección realizada por la Policía Municipal de Sucre en el galpón del criadero, se confirmó que se trataba del Criadero San Antonio Abad, una empresa que ha promovido actividades bajo la fachada de ser «conservacionista» y «defensora de la biodiversidad». No obstante, la empresa ha seguido exportando aves silvestres al mercado internacional, con permisos aparentemente aprobados por las autoridades locales y por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
A pesar de las acusaciones y del anuncio de la Fiscalía, la investigación no ha mostrado avances significativos. Mientras tanto, el Criadero San Antonio Abad ha seguido operando, y se han registrado exportaciones de 8,5 toneladas de animales silvestres vivos entre septiembre y diciembre de 2023, después de la inspección policial. Los registros muestran exportaciones a India, Tailandia y Kuwait, con 4,18 toneladas de pájaros Psitaciformes, que incluyen especies como loros, guacamayas y cacatúas.
De las especies exportadas por el criadero, un tercio figura en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y el Sistema Venezolano de Diversidad Biológica (SVDB). Especies como la guacamaya militar, el tucán arcoiris y el tucán de pico acanalado están clasificadas como «Vulnerable» o «Casi amenazado», lo que refleja la necesidad urgente de protección y control sobre estas operaciones para salvaguardar la biodiversidad.
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