En julio, el ecosistema de las criptomonedas enfrentó pérdidas devastadoras, con hackeos que totalizaron aproximadamente 266 millones de dólares a través de 16 ataques distintos. El incidente más significativo ocurrió el 18 de julio, cuando el exchange de criptomonedas indio WazirX sufrió un ataque que resultó en la pérdida de más de 230 millones de dólares. Este evento, que representó el 86.4% del total de las pérdidas del mes, ha sido atribuido a hackers norcoreanos, según las investigaciones independientes que identificaron patrones y técnicas específicas del exploit. Con información de Cointelegraph.
La firma de investigación blockchain PeckShield reveló que los hackers aún controlan los fondos robados de WazirX, que suman 61,154 Ether, desde el 1 de agosto. Además de WazirX, otros proyectos importantes fueron víctimas de ataques en julio. Compound Finance, un protocolo algorítmico, perdió 24 millones de dólares, mientras que el protocolo puente Li.Fi y el proveedor de liquidez Rho Markets enfrentaron pérdidas de 10 millones de dólares y 8 millones de dólares, respectivamente. En todos estos casos, los hackers han transferido los fondos a Tornado Cash, un mezclador de criptomonedas, para dificultar el rastreo.
En comparación, junio registró pérdidas menores en hackeos de criptomonedas, alcanzando los 176 millones de dólares distribuidos en unos 20 incidentes. La vulnerabilidad de las plataformas centralizadas sigue siendo un tema preocupante. Hacia finales de julio, la blockchain de Terra experimentó un hackeo que resultó en una pérdida de 6 millones de dólares, forzando una pausa temporal en la altura del bloque 11,430,400. El atacante explotó una vulnerabilidad conocida para robar 60 millones de ASTRO y 500.000 dólares. Los desarrolladores de Terra implementaron rápidamente una actualización de emergencia para resolver el problema.
Deddy Lavid, cofundador y CEO de la firma de seguridad Web3 Cyvers, destacó que las entidades financieras centralizadas (CeFi) continúan siendo el blanco principal de los hackers en 2024. En una entrevista con Cointelegraph, Lavid explicó que los ataques a proyectos basados en contratos inteligentes también están aumentando, señalando que las vulnerabilidades más significativas surgen tanto del código como de la negligencia personal.
La creciente sofisticación de los ataques y la vulnerabilidad de las plataformas de criptomonedas subrayan la necesidad urgente de mejorar la seguridad en el sector. Las pérdidas de julio demuestran cómo los hackers están cada vez más enfocados en explotar debilidades en las plataformas centralizadas, mientras que los esfuerzos por rastrear y recuperar los fondos robados enfrentan obstáculos significativos debido al uso de tecnologías de anonimización como Tornado Cash.
