En un intento por fortalecer su defensa ante un juicio por corrupción pública, el banquero Julio M. Herrera Velutini ha sumado a su equipo legal a dos figuras destacadas: Robert Joseph “Bob” Eatinger, exdirector legal de Operaciones de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), y Christopher Kise, conocido por su papel en la defensa del expresidente Donald Trump. Esta decisión sigue al rechazo de la jueza federal Silvia Carreño Coll de retrasar el juicio de enero a septiembre de 2025. Con información de Primera Hora.
Robert Joseph “Bob” Eatinger, quien sirvió en la CIA hasta 2015, ya ha sido formalmente aceptado como parte del equipo de defensa de Herrera Velutini. Por otro lado, Christopher Kise, quien se unió al equipo de Trump en 2022 y es reconocido por haber ganado cuatro casos en el Tribunal Supremo de Estados Unidos, acaba de completar su integración al equipo, tras obtener acceso a la base de datos del Tribunal federal de Distrito en Puerto Rico.
Además de estos nuevos miembros, el equipo de defensa incluye a Lilly Ann Sánchez, abogada de Jeffrey Epstein, y otros abogados de renombre como Marc Kasowitz, Michael Zweiback, Robin Rathmell, Jason Short y la abogada puertorriqueña Sonia Torres Pabón.
Julio Herrera Velutini enfrenta acusaciones de corrupción junto con la exgobernadora Wanda Vázquez Garced y el exagente del FBI, Mark Rossini. Según la acusación presentada en marzo de 2022, Herrera Velutini y Rossini habrían ofrecido apoyo financiero a la campaña política de Vázquez Garced a cambio de su influencia para remover al entonces comisionado de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), George Joyner Kelly, quien investigaba a Bancrédito, propiedad de Herrera Velutini.
Jueza federal ratifica cargos por soborno y fraude contra Julio Herrera Velutini y coacusados
Los abogados de Herrera Velutini argumentan que un juicio en enero de 2025 podría perjudicar significativamente su derecho al debido proceso. Alegan que los retrasos y tácticas de la Fiscalía federal han obstaculizado su capacidad para preparar una defensa adecuada. No obstante, la jueza Carreño Coll consideró estas preocupaciones como «prematuras».
A medida que el juicio se aproxima, Julio Herrera Velutini sigue enfrentando serias acusaciones de corrupción, que manchan su reputación y la de su banco, Bancrédito. La adición de figuras polémicas a su equipo de defensa refleja un intento desesperado por evitar consecuencias legales, lo que levanta sospechas sobre su involucramiento en el presunto soborno de $300,000 para influir en la exgobernadora Wanda Vázquez Garced. Mientras tanto, las admisiones de culpabilidad por parte de sus colaboradores cercanos, Frances Díaz y John Blakeman, incrementan la presión sobre Herrera Velutini, cuyas tácticas legales parecen más una maniobra dilatoria que un esfuerzo por demostrar su inocencia. La atención pública sigue enfocada en este caso, con los acusados bajo la lupa, esperando un juicio que podría exponer aún más detalles perturbadores sobre las prácticas empresariales del banquero.