Las estafas con criptomonedas alcanzaron un nuevo récord en 2024, con al menos 9.900 millones de dólares obtenidos por estafadores, según el Crypto Crime Report 2025 de Chainalysis. Entre los fraudes más lucrativos, las estafas sentimentales, también conocidas como pig butchering, crecieron un 40% en ingresos y un 210% en número de transacciones, consolidándose como una de las tácticas más utilizadas por los delincuentes digitales. Con información de Observatorio Blockchain.
Estos fraudes consisten en que los estafadores establecen relaciones amorosas o de amistad con sus víctimas para luego inducirlas a invertir en esquemas fraudulentos. Aunque las estafas de inversión siguen representando el 50% del total, las sentimentales ya abarcan el 33%, demostrando un cambio en la estrategia de los criminales, quienes ahora buscan pagos menores de una mayor cantidad de víctimas en lugar de enfocarse en pocas personas con montos altos.
El auge de estas estafas está vinculado al acceso a bases de datos robadas y herramientas de inteligencia artificial, que permiten a los delincuentes perfeccionar sus engaños. En 2024, los estafadores gastaron 375,9 millones de dólares en criptomonedas para adquirir tecnología especializada, y los ingresos de los proveedores de herramientas basadas en IA aumentaron un 1900% en los últimos tres años, facilitando la creación de identidades falsas y contenido persuasivo.
Además, Chainalysis identificó 95 millones de dólares en pagos a proveedores de bases de datos, lo que permite a los criminales seleccionar víctimas más vulnerables con información detallada. Según Jacqueline Burns Koven, jefa de Inteligencia en Ciberataques de Chainalysis, “el ecosistema delictivo se ha profesionalizado y desmantelarlo requerirá una cooperación estrecha entre el sector público y privado”.
Con el fraude digital en constante evolución, expertos advierten que la única forma de frenar su avance es mediante monitoreo en tiempo real, herramientas de investigación avanzadas y una legislación más estricta que permita bloquear los flujos financieros ilícitos. Mientras tanto, las estafas románticas siguen cobrando nuevas víctimas, demostrando que, en el mundo de las criptomonedas, el amor puede ser el engaño más costoso.