Los grupos de delincuencia organizada hacen todo lo posible por impedir que el dinero obtenido, producto de sus actividades ilícitas, quede al descubierto. Para lograrlo pueden moverlo a través del contrabando en efectivo, utilizarlo para comprar otros bienes y colocarlo en la economía legal, donde logra grandes ganancias. La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el delito (ONUDD) estima que a través del sistema financiero, la delincuencia organizada legitima alrededor del 70% de las ganancias ilícitas y solo se intercepta e incauta el 1 por ciento.
Aunque el fin de la delincuencia organizada es la obtención de ingentes cantidades de dinero, mediante actividades ilícitas, los resultados de la “II Encuesta sobre Delito Organizado en Venezuela”, presentados el pasado martes 22 de septiembre, ubican la legitimación de capitales (lavado de dinero) con bajo reconocimiento por parte de los entrevistados, quienes sitúan el tráfico de drogas, el contrabando de productos y el robo y venta de vehículos y repuestos, como los tres delitos más comunes en Venezuela, sin embargo, todos son delitos previos o antecedentes de la legitimación de capitales.
Este estudio ejecutado por la empresa Delphos y promovido por el Observatorio de Delito Organizado en Venezuela y el Laboratorio de Ciencia Sociales (Lacso) fue realizado en 7 regiones del territorio nacional: Región Capital: Distrito Capital y Estado Miranda; Región Centro-occidental: Aragua, Carabobo, Cojedes, Lara, Falcón y Yaracuy; Región Andina: Táchira, Mérida y Trujillo; Región Llanos: Apure, Barinas, Portuguesa y Guárico; Región Zuliana: Zulia; Región Nor-oriental: Anzoátegui, Monagas, Sucre y Nueva Esparta; Región Guayana: Bolívar y Delta Amacuro. en el período de julio y agosto del presente año 2015, El Tamaño de la muestra fue de 500 entrevistas por región para un total de 3.500 en el ámbito nacional.
Roberto Briceño León, representante de LACSO, destaca varias conclusiones importantes sobre los resultados de la encuesta: La primera es que el delito organizado está presente en todo el país, aunque de manera desigual. La segunda es que la encuesta atribuye el delito organizado a la delincuencia común, a las mafias, a los pranes en las cárceles, pero no a la guerrilla ni a los paramilitares. Considera además que los militares han sido corrompidos por el narcotráfico.
Otro nivel de conclusión importante – agrega- es que las personas consideran que muchos de los controles económicos aplicados por el gobierno han favorecido a la delincuencia organizada. En este marco, consideran peligroso cooperar con las policías y con el sistema de justicia penal, “porque no hay respuesta por parte de estas instituciones, están involucrados o han facilitado el establecimiento de la delincuencia organizada.
El tráfico de drogas queda como el delito más reconocido más en la mayoría de las regiones, “sorprendentemente en la región los llanos no aparece tan marcado, porque fundamentalmente es una zona de tránsito, donde no hay mercancía, no hay negoci”.
— ¿Cuál es el delito que hace su debut en este marco de la delincuencia organizada?
— Un elemento importante ahora es la venta ilegal de productos (de primera necesidad) , llamado el “bachaqueo”. La gente entiende que no es una actividad aislada de una persona, aunque, hay quienes pueden hacerlo a nivel personal, pero en conjunto consideran que hay toda una organización en la cual están involucrados el propio gobierno, las autoridades y los militares en el negocio ilegal de la venta de productos regulados.
Por su parte, Luis Cedeño, director de la asociación civil Paz Activa y del Observatorio del Delito Organizado destacó que la delincuencia organizada es uno de los factores que incide sobre los niveles de inseguridad en Venezuela, pero no es el único. Hay otros factores que propician el avance del delito organizado y citó entre éstos la debilidad institucional y del sistema de justicia, «aumentan los delitos, aunque aumentan las penas, es decir el aumenta de las penas no disminuye el delito».
Asimismo se refirió a los controles económcios, «mientras más controles, surgen más delitos». Mencionó además a la impunidad, la corrupción, el centralismo y la polarización política, que a su juicio no contribuye a resolver los problemas de seguridad, ambos lados son espinosos y no se manejan concertadamente.
Crece la delincuencia organizada
Los entrevistados perciben que los controles y restricciones económicas impuestos desde el Gobierno Nacional crean oportunidades para el accionar del Delito Organizado. Por cada 4 entrevistados, tres están de acuerdo que el control de la economía propicia la corrupción, uno está en desacuerdo.
Cuando se preguntó ¿Qué tan de acuerdo o en desacuerdo está usted con las siguientes afirmaciones?
- El control de la economía por el gobierno propicia la corrupción: 72.1% estuvo de acuerdo.
- El gobierno con el control cambiario del dólar favorece el dólar negro: 70.4 % de acuerdo.
- El gobierno con el control de precios favorece el bachaqueo: 66.8 % de acuerdo.
- El gobierno con el precio de la gasolina favorece el contrabando: 62.9% de acuerdo.
- El empobrecimiento ha llevado a más personas a vincularse con la delincuencia organizada: 79.1% de acuerdo.
- El control de precios ha propiciado la venta ilegal de productos regulados: 76.4% de acuerdo.
- La falta de oportunidades lleva a los jóvenes a meterse en el negocio de las drogas: 74.1% de acuerdo.
- La entrega de dólares preferenciales ha facilitado la corrupción: 73.7 de acuerdo.
Los entrevistados perciben que las medidas económicas del Gobierno Nacional y el empobrecimiento favorecen la existencia y sostenibilidad le del Delito Organizado.
Consultados si a las acciones del Gobierno y sus instituciones propician la operatividad del Delito Organizado, se les preguntó nuevamente a los entrevistados: ¿Y con las siguientes afirmaciones, qué tan de acuerdo o en desacuerdo está usted…?
- Los funcionarios policiales y militares son los que venden armas al delito organizado: 65.9% de acuerdo
- El gobierno le entregó el control de las cárceles a los presos: 61.9% de acuerdo.
- El gobierno promueve a los colectivos armados: 62.6 %de acuerdo.
- El discurso del gobierno favorece la actuación del delito organizado: 56.7%de acuerdo.
- Las Zonas de Paz han favorecido el delito organizado y a los grupos armados: 54.7 de acuerdo.
Los entrevistados creen que los cuerpos de seguridad del Estado, en lugar de combatir, propician la existencia y operatividad del Delito Organizado.
Más de la mitad de los entrevistados manifiestan temor a la denuncia y a cooperar con los cuerpos policiales y el sistema judicial.
Desconfianza y temor
¿Y qué tan de acuerdo o en desacuerdo está usted con que en Venezuela…
- Es muy peligroso denunciar a las bandas del delito organizado: 81.1% de acuerdo.
- Es muy peligroso ser testigo en un juicio penal: 79.8 % de acuerdo.
- No se castiga al delito organizado porque los jueces están amenazados o comprados: 75% de acuerdo.
- Es muy peligroso cooperar con la policía para enfrentar al delito organizado: 76.7% de acuerdo.
- No se persigue al delito organizado porque el gobierno ha debilitado a las policías 58.8% de acuerdo.
Las salidas
Los entrevistados creen que el Delito Organizado se podrá combatir depurando a las policías. Se considera el desarmar a los colectivos. No están de acuerdo con acciones mediadoras, como negociar con las bandas armadas.
Otros datos
La mitad de los entrevistados a nivel nacional, en los últimos 12 meses, ha sido víctima de robo o hurto.
64% de los entrevistados considera que, en su comunidad, es fácil o muy fácil conseguir drogas.
58% de los entrevistados considera que, en su comunidad, es fácil o muy fácil conseguir un arma de fuego. Esta percepción ha aumentado entre.
50% de los entrevistados considera que, en su comunidad, es fácil o muy fácil mandar a matar a alguien.-
El 76% de los encuestados considera que la inseguridad personal ha empeorado en el país en los últimos doce meses.
Conclusiones
El 66% de los entrevistados consideran que la gestión del Gobierno Nacional en contra del Delito Organizado es “mala”.
La gran mayoría de la población, en todo el país y de todos los sectores sociales o políticos, considera que el incremento del Delito Organizado es una amenaza para la democracia.