La decisión del Tribunal Supremo de Justicia de otorgar vigencia al Decreto de Emergencia Económica afecta seriamente las próximas negociaciones que Petróleos de Venezuela quiere llevar a cabo con los inversionistas para postergar el pago de la deuda externa, advirtió el economista Orlando Ochoa.
“Ir a una renegociación de la deuda con un decreto de emergencia que desconoce a la Asamblea Nacional le resta completamente credibilidad al gobierno y profundiza la crisis política. De allí que los mercados pueden verse más renuentes a partir de ahora para refinanciar cualquier operación financiera que luego pudiera ser desconocida por el Ejecutivo o la petrolera estatal”, dijoa El Nacional
Añadió que la medida del máximo tribunal debilita la base jurídica de cualquier plan económico, financiero o petrolero que el gobierno quiera llevar a cabo.
El también economista Asdrúbal Oliveros asegura que la decisión del TSJ “es un juego de poder en el que el madurismo intenta mostrar que tiene el control institucional”.
Agregó que no cree que la crisis mejore, pues “hay una asincronía entre los tiempos políticos y la economía”. Opinó que la situación incluso se puede poner mucho peor en la medida en que el chavismo decida radicalizarse.
La presidente de Consecomercio, Cipriana Ramos, manifestó que si con ese decreto de emergencia el gobierno lo que busca es “acceder a los bienes del sector privado, llámese empresas o personas naturales, es muy grave”.
Indicó que los niveles de producción no se incrementan porque se decretan, sino cuando se modifique el modelo económico con el que el gobierno ha venido operando.
“El Plan de la Patria no es la solución, no ha servido. Si tenemos una Constitución bolivariana de Venezuela aprobada por el soberano, ¿por qué no la aplicamos y respetamos?”, expresó.
Ramos aseguró que incluso el propio presidente Nicolás Maduro ha reconocido que prácticamente no están recibiendo dólares por la venta de petróleo. “Aquí lo que tenemos es que producir para abastecer el mercado nacional y para exportar divisas. Lo primero es que se comience a vender la materia prima para las empresas del sector privado”.
El presidente de Fedecámaras, Francisco Martínez, señaló que el decreto no contribuye “en lo absoluto a superar la crisis”. Argumentó que desde los considerandos del texto presentado por el Ejecutivo hay errores conceptuales, pues la responsable de la crisis no es la guerra económica porque no existe. “Por tanto, las soluciones que plantea son erradas”.
Destacó que hasta que el gobierno no se siente con los trabajadores y los empresarios a diseñar las salidas a la crisis, nada va a mejorar. “Si no se genera confianza y se incentiva la producción, no vamos a llegar a nada”. Indicó que la inflación “la controlan o la generan los gobiernos, no los empresario, y para eso se requiere tener disciplina fiscal. Si no se le da independencia al Banco Central de Venezuela, nada se resolverá”