CCD La startup cierra un préstamo de 10 millones con un fondo con sede en Barbados cuyos consejeros son directivos estrechamente vinculadas al empresario.
Jobandtalent ha cerrado un nuevo préstamo para respaldar su modelo de ETT digital. Se asegura varios millones de euros para financiarse. Y el dinero lo aporta un vehículo con sede en Barbados y ligado al venezolano Alejandro Betancourt, máximo accionista de la compañía española Hawkers investigado por blanqueo de capitales en diferentes países y uno de los conocidos como ‘bolichicos’, jóvenes empresarios que hicieron fortuna con contratos públicos del chavismo entre varias acusaciones de sobornos.
El préstamo se hizo público el pasado 5 de junio al Companies House, el registro mercantil británico. Lo firma por un lado Jobandtalent Services Limited, la filial de servicios de la startup española con sede en Reino Unido (donde también reside el holding de todo el grupo). El prestamista es una sociedad llamada Associated Ventures Corp, con sede en Barbados. Por parte de este último fondo, quien firma es Ana Convit.
Sociedad en Barbados y con Betancourt como nexo
¿Quién es Associated Ventures Corp? Se trata de una sociedad que aparece en los llamados Offshore Leaks, la investigación llevada a cabo en el año 2013 por el Consorcio Internacional de Periodistas (ICJ) a nivel mundial y que destapó miles de sociedades radicadas en paraísos fiscales.
La sociedad fue creada en el año 2015 y tiene tres consejeros. Dos tienen vinculaciones estrechas con Betancourt. Por un lado, Ana Graciela Convit Guruceaga, del entorno cercano de uno de los principales socios de Alejandro Betancourt (Francisco Antonio Convit Guruceaga) que lo ha acompañado como ejecutivo en muchas de las sociedades creadas en los últimos años.
Por otro se encuentra Edgad Romero Lazo, hijo del presidente de la patronal venezolana Fedecámaras en los años 90 y director de Operaciones de Derwick Associates, la sociedad principal con la que ha operado a nivel internacional el empresario venezolano y con la que se hizo con los 12 contratos del Gobierno latinoamericano.
También comparten con Derwick y Betancourt la firma legal que ejerce como ‘secretario’ en el consejo: Trident Corporate Services. Hay un tercer consejero en forma de sociedad cuya identidad se desconoce: Corporate Services Limited Eighth Avenue.
10 millones de euros más: “Las mejores condiciones”
En el documento hecho público en el registro mercantil no se precisa la cifra de inversión, pero fuentes oficiales de la compañía aseguran que son 10 millones de euros. Hasta ahora, Jobandtalent había acudido a diferentes bancos, fundamentalmente en España y, en menor medida, en Reino Unido y Suecia, con el objetivo de financiar su circulante, pues debe pagar las nóminas de los empleados de su ETT, mientras que cobra a 30 días a las empresas que le contratan. En total había recaudado unos 8 millones de euros. Se suman a los 2 millones de deuda aportados por el fondo Harbert, una firma que cuenta con 6.000 millones de dólares en activos bajo gestión, como adelantó La Información.
¿Por qué hacerlo con esta sociedad vinculada a Betancourt? “Después de haber visto diferentes opciones de financiación, las que mejores condiciones ofrecían son las que hemos cogido; teniendo así un mix de fondos (Habert y Associated) y bancos”, aseguran fuentes oficiales de Jobandtalent, a preguntas de este medio.
Ni en el documento oficial ni en los registros sobre la compañía queda claro que el dinero sea aportado directamente por Betancourt en el fondo, aunque sería lógico pensar que sí. “Nosotros firmamos la operación con Ana Graciela [Convit Guruceaga], que ha llevado toda la relación”, se limitan a asegurar las mismas fuentes. Esta inyección aportada por Associated Ventures Corp sólo tiene forma de préstamo puro y no hay posibilidad de convertirlo en acciones en el futuro.
Varias investigaciones contra Betancourt
Alejandro Leopoldo Betancourt (Venezuela, 1970) es uno de los llamados ‘bolichicos’ venezolanos, empresarios que hicieron fortuna con contratos vinculados a la electricidad del gobierno chavista. Durante años han estado en la picota judicial, con diferentes investigaciones por pagos de sobornos y blanqueo de capitales. Fue en 2010 cuando supuestamente acudió, tras el decreto de emergencia energética en el país venezolano, para adjudicarse 12 contratos para obras eléctricas sin licitación por varios miles de millones de dólares y con importantes sobreprecios, según las denuncias del consultor energético José G. Aguilar.
El empresario está siendo vigiliado tanto en España como en otros países como Suiza, Estados Unidos y Venezuela por un presunto blanqueo de capitales, según informaron recientemente El Mundo y El Confidencial. De acuerdo a la investigación de este último, de la mano de otros tres medios venezolanos, el empresario canalizaba con Derwick gran parte de sus beneficios en los diferentes proyectos del país latinoamericano -con alianzas también con el gigante ruso Gazprom- a través de bancos suizos.
A estas investigaciones hay que sumar otra que se llevó a cabo en un tribunal de Nueva York, tras la denuncia del embajador estadounidense en Venezuela y un activista, por presuntamente haber sobornado a altos funcionarios del país latinoamericano para lograr los contratos. Fue desestimada porque la Justicia no tenía pruebas de que los Betancourt y su primo vivieran en Nueva York, por lo que no tenía competencia en el caso (no entró al fondo de la cuestión).
En España, además de su inversión de varias decenas de millones de euros en Hawkers (realizada a través de otra de sus sociedades, O´hara Financial), Betancourt comparte dos enseñas en este país con su primo Pedro Trebbau López. Una es Guanaba Real Estate y otra, Compañía de Inversiones Agrícolas Trieste. Esta última, dedicada al negocio inmobiliario, contaba a cierre del ejercicio 2016 con activos por valor de 30 millones de euros y unas deudas a largo plazo de 36,5 millones, según el balance presentado en el Registro Mercantil.
A través de Derwick Associate se convirtió en la ganadora de la subasta de la finca expropiada al que fuera propietario de Viajes Marsans y expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz-Ferrán, tras ofrecer 24 millones.
La conexión con Hawkers: Félix Ruiz
Esta inversión en Jobandtalent del vehículo relacionado con Betancourt sería la segunda que éste lleva a cabo en España. La primera es Hawkers, en cuya compañía ha inyectado más de 60 millones de euros en dos ampliaciones de capital desde que aterrizara como presidente del consejo en 2016.
En esa ronda de financiación de 2016, de 50 millones de euros, entraron como inversores de la firma de gafas de sol alicantina otros dos accionistas. Uno de ellos era Félix Ruiz, cofundador de la antigua red social Tuenti y presidente de Jobandtalent desde el año 2014. Todos lo señalaron como el artífice de que Betancourt aterrizara en Hawkers.
Betancourt es hoy el máximo accionista de Hawkers, donde en los últimos meses se ha vivido un particular terremoto en la cúpula con la salida de Hugo Arévalo, quien entró junto a Ruiz como inversores externos en la ronda de 2016, y Alex Moreno, uno de los cofundadores que vendió sus acciones al venezolano.
Jobandtalent fue fundada en el año 2009 como un ‘tablón’ de anuncios de empleo. En 2016, tras dos paquetes de despidos con los que se prescindió de un tercio de la plantilla, entró en el accionariado el fondo de capital riesgo europeo Atómico en una ronda de financiación de 42 millones de dólares. Fue el arranque de su cambio a un modelo de Empresa de Trabajo Temporal (ETT) digital.
Además de Atómico, que controla el 20% de la sociedad, Félix Ruiz y otros coinversores cuya identidad no ha trascendido representan el segundo mayor accionista bajo la sociedad Gainsboro Developments, con sede en Luxemburgo. Umber Overseas Investments, con el 5% de la sociedad, también tiene sede en el país europeo. Desde la compañía aseguran que Betancourt no es accionista.
El fondo español Kibo Ventures controla el 7% y JME Ventures suma algo más del 3%. Adeyemi Ajao está presente con la sociedad E-Participations Corp, con sede en Barbados. Se suman desde inversores internacionales como Fabrice Grinda, un importante ‘business angel’ de Silicon Valley’, a directivos como Alfonso Villanueva, al frente de la estrategia global de Paypal.
Con el cambio de modelo, la compañía cerró el ejercicio 2017 con una facturación bruta de 49,7 millones de euros, según las cifras de la empresa (las cuentas del ‘holding’, con sede en Reino Unido, son abreviadas y no incluyen la cuenta de pérdidas y ganancias). A esa cantidad hay que eliminar todos los costes de ventas (principalmente las nóminas que han de pagar a los empleados). Estos números representan el doble de lo logrado un año antes. ¿La razón? Se han convertido en proveedores de sectores que ‘tiran’ de empleo temporal como la logística -con firmas que trabajan para gigantes como Amazon-, el transporte de pasajeros -gestiona una parte significativa de las flotas de conductores de muchos de los ‘amos’ de las VTC en España- o el ‘retail’.
