El Banco Central de Uruguay espera una semana agitada para el Bandes Uruguay tras las sanciones impuestas por Estados Unidos a esta institución. La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC) sancionó a Bandes Venezuela, y a sus filiales en ese país (Banco Bicentenario del Pueblo, de la Clase Obrera, Mujer y Comunas – Banco Universal, y Banco de Venezuela), Banco Prodem SA de Bolivia y Banco Bandes Uruguay. La medida se tomó por el arresto de Roberto Marrero, Jefe de gabinete de Juan Guaidó.
En el informe de la OFAC se indica que “a principios de 2019, Maduro intentó retirar más de mil millones de dólares de Venezuela a través de Bandes a su filial en Uruguay, Banco Bandes Uruguay SA“.
Las sanciones implicarán el congelamiento de todos los bienes y activos que estas entidades puedan tener en Estados Unidos, o en posesión o control de personas estadounidenses, y les prohíbe toda transacción financiera con individuos o entidades estadounidenses, o en tránsito en el país.
Los clientes del Bandes Uruguay se verán afectados en la operativa de giros al exterior, recibir fondos del exterior, o efectuar operaciones de comercio internacional. También desde marzo de 2020, las emisoras de tarjetas Visa, Mastercard y American Express no podrán tener relación con el banco. Actualmente Bandes Uruguay opera con la firma Visa.
No se verán afectados en las operativas dentro de Uruguay, ya sea todo lo referente a cuentas corrientes, cobro de sueldos, u operativa con las tarjetas emitidas por el banco, desde el cual prefirieron no hacer ningún tipo de comentarios, en el entendido de que son una institución dependiente de una matriz que está en Venezuela.
Si bien en la noche del viernes desde el Banco Central de Uruguay (BCU) se dijo a Infobae que no se realizarían por ahora comentarios sobre las sanciones, durante este fin de semana la autoridad monetaria de Uruguay se van a asesorar en profundidad sobre lo que implica la medida y como puede repercutir en la plaza local. El tema central es cómo van a actuar los demás bancos instalados en Uruguay frente a una sanción que es la primera vez que se produce a un actor del mundo bancario local. En Uruguay los bancos comerciales son todos internacionales, a excepción del Banco República.
A la cabeza de las instituciones financieras se encuentra el Itaú de Brasil, Scotiabank (Canadá), y los españoles Santander y BBVA. A estos se agregan el HSBC, la Banque Heritage, el Banco Nación de Argentina y el Citibank.
Se teme que una medida que tomen las instituciones extranjeras pueda ser restringir la operativa interbancaria, dejando afuera al banco venezolano. También se piensa desde el BCU poner especial atención la semana próxima en el movimiento de los clientes con depósitos, ya que se teme una fuerte pérdida de estos, debido a que nadie quiere tener relaciones con un banco sancionado por Estados Unidos.
Pero tampoco Bandes Uruguay podrá recibir capitalización de su casa matriz. Las operaciones internacionales que llegan a Uruguay pasan por J.P. Morgan, el banco estadounidense, quién actúa como corresponsal del Banco Central uruguayo. Desde el BCU se canalizan las operaciones a los bancos. Por lo tanto al ser J.P Morgan un banco estadounidense, no saldrá al exterior ni ingresará dinero desde cualquier punto del planeta al Bandes Uruguay. Esto coloca al banco venezolano en una situación por demás compleja.
Asimismo se espera conocer si Moody´s, la calificadora de Bandes Uruguay, toma la semana próxima alguna resolución con respecto a la nota del banco, debido a las sanciones de Estados Unidos.
Los números
Bandes llegó a Uruguay en 2006 al hacerse cargo de Cofac, una cooperativa financiera que terminó siendo un banco, pero quebró poco después. Hacía poco más de un año que había asumido Tabaré Vázquez en lo que era el primer gobierno del Frente Amplio, y se solicitó ayuda a Hugo Chávez para salvar una institución que nadie la quería y si no se encontraba un comprador terminaba en la quiebra, como un coletazo de la crisis bancaria de 2002.
Chávez vio entonces la oportunidad de expandirse en la región y el Bandes pasaría a ser el banco con el cual se operarían todos los negocios entre Venezuela y Uruguay. En la actualidad está presente en 10 de los 19 departamentos (provincias) de Uruguay.
Aunque nunca tuvo números muy positivos en su operativa, canalizó los negocios que llevaron adelante los gobiernos del Frente Amplio con Venezuela en los últimos 13 años.
Según los datos del BCU al finalizar febrero, el Bandes tenía 28 mil clientes con depósitos de los cuales 774 son extranjeros. De estos, 409 tenían colocaciones por menos de 5.000 dólares y en el tramo entre 50 mil y más de 250 mil dólares había 175. Los depósitos en total rondan los 190 millones de dólares.
En una reciente comparecencia ante la Comisión Especial con Fines Legislativos de Transparencia, Lucha contra el Lavado de Activos y Crimen Organizado del parlamento la diputada Graciela Bianchi (Partido Nacional), dijo: “mis asesores accedieron a la información de que durante 2018 los depósitos de no residentes, en el Bandes, pasaron de 53 millones de dólares a 98 millones. Son cifras a las que se puede acceder. A fines de 2017, la casi totalidad de los clientes no residentes del Bandes eran venezolanos; aparece también algún panameño, que puede ser una sociedad. No pudimos desentrañarlo con claridad. Además, surge que a inicios de 2018 el Bandes tenía 27 clientes no residentes con más de 250 mil dólares, y a fines de 2018 tenía 44 clientes en esas condiciones, es decir por lo menos 17 clientes nuevos…la única opción que parece verosímil es que los clientes nuevos tienen que ser venezolanos y con vinculaciones con su gobierno”.
Juan Pedro Cantera, Superintendente de los Servicios Financieros del BCU, sostuvo en esa ocasión que el Bandes “tiene una operativa de negocios internacionales, particularmente de gestión de liquidez y de pagos de instituciones que están relacionados con su accionista, que es Banco Bandes Venezuela, un banco público en Venezuela, con lo cual la adquisición de bienes y servicios que realiza Venezuela tiene los pagos a través de Banco Bandes Venezuela, y una parte de ellos se canaliza a través de Banco Bandes Uruguay”.
Estos depósitos hay colocaciones de entidades públicas venezolanas, empresas y gobernaciones, que utilizan el Bandes Uruguay para operaciones internacionales. Al cerrarse varias corresponsalías financieras en Estados Unidos, toda la operativa internacional de parte del estado venezolano se estaba canalizando por Bandes Uruguay Tras las sanciones de Estados Unidos este tipo de operaciones se van a paralizar.
Como consecuencia, los depositantes extranjeros podrán sacar su dinero, pero deberán buscar la forma de canalizarlo al exterior, si lo quieren retirar del país ya que no lo podrán hacer más por el Bandes.