La Policía Nacional de España ha desmantelado la red de prostitución dedicada al blanqueo de los millonarios beneficios de 16 páginas webs de explotación sexual.
En la macro-operación participaron 15 países bajo la coordinación de Europol y Eurojust.
La Operación Webmaster culminó con seis detenidos, la mayoría finlandeses, dedicados a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en Finlandia y Suecia.
El líder, de unos 60 años, detenido en Rumanía, es un viejo conocido de la policía finlandesa, dedicado al proxenetismo desde hace casi 20 años.
La red obtuvo más de 40 millones de euros en los últimos años.
Se cerraron 16 webs de contactos
Tres de los arrestos se han practicado en España, concretamente uno en Torrevieja (Alicante) y dos en Marbella (Málaga).
Las webs tenían el 75 por ciento de toda la prostitución en Finlandia, un país en el que, al igual que en Suecia, no hay clubes de alterne ni prostitución en la calle, por lo que solo a través de webs de contactos es posible acceder a estos servicios, tanto anunciarlos como contratarlos.
La operación empezó en Torrevieja en 2016, cuando se desarticuló una red de trata de mujeres nigerianas deteniendo a 23 personas y liberando a 15 víctimas.
La prostituta o su proxeneta pagaban unos 70 euros por anunciarse durante una semana y los clientes 20 euros por ver los anuncios y conseguir el contacto, algo que se hacía de forma confidencial.
Las ganancias de estas páginas podían superar el millón de euros al año, según los investigadores de la Policía Nacional.
Las pesquisas conducen a un entramado criminal asentado en España que gestiona páginas web de contactos que tienen su negocio principalmente en Finlandia y Suecia.
En Marbella, la organización lavaba sus ganancias con la apertura de cuentas a terceros. En 2011 dieron un paso con la creación en España de empresas pantalla dedicadas a la inversión inmobiliaria y a la tecnología.
También gastan sus beneficios de las webs en coches y motos, mientras que deciden “internacionalizar” su entramado con empresas en Rumanía o Malta y, en una última fase, con transacciones a Hong Kong y Panamá.
Desde 2010 los investigadores estiman que la organización habría obtenido un beneficio de mas de 40 millones de euros en webs que funcionaban desde 2005.
Se emitieron tres órdenes europeas de detención para los máximos responsables en Finlandia, Rumanía y Malta además de 17 entradas y registros.
Los servidores de las páginas web fueron intervenidos, así como los discos duros, ordenadores y otros dispositivos encriptados, documentación de paraísos fiscales, pasaportes falsos, numerosas joyas y relojes y documentación relacionada con contratos privados o cuentas bancarias.
Se bloquearon cuentas bancarias repartidas por España, Finlandia, Malta, Rumanía, Bulgaria, Reino Unido, Países Bajos, Rusia, Estonia, Suecia, Panamá y la República Popular China, junto al embargo de las participaciones en seis empresas.