CCD | Un 30 por ciento de las divisas autorizadas por la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) se desviaron para fines distintos a los solicitados, reveló el ministro de Energía vicepresidente del área económica, Rafael Ramírez, quien aseguró que una Comisión Presidencial investiga estos casos y que ya ha sido laborada una lista con las empresas y los montos recibidos o administrados de manera fraudulenta, y no puso reparos en que el Presiente Nicolás Maduro la difunda.
El representante del alto gobierno fue entrevistado en el programa José Vicente Hoy, donde estimó que el 82 % de las divisas captadas por el Estado serán vendidas a la tasa oficial subvencionada de 6,3 bolívares por dólar y solo el 18 % restante al doble de ese tipo de cambio fijo.
Ramírez agregó que en el nuevo esquema cambiario se le dará prioridad a la alimentación, salud, educación y producción en asignación de dólares. «Hemos gastado miles de millones de dólares en traer alimentos a nuestro país», expresó en referencia al «plan excepcional de importación de alimentos que está en funcionamiento», con el fin de combatir la escasez y desabastecimiento, problemas que atribuyó al contrabando y la especulación. Sólo hay problema de abastecimiento en 40 productos, manifestó.
El nuevo plan de divisas – aseveró – permite al Gobierno definir la cantidad de dólares a utilizar para atender las prioridades de la nación para su desarrollo, establecidas este año en 42.960 millones de dólares, y el resto, un promedio de 11.800 millones de dólares, para atender aspectos no esenciales para la economía.
Agregó que el establecimiento de un nuevo orden económico plantea una mejor administración de divisas a través del recién creado Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex), el cual evitará el desvío de dólares para objetivos personales de sectores que no son prioritarios para la economía nacional, insistió Ramírez.
Al respecto, recordó que con la antigua Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) el Estado sabía la cantidad de divisas que disponía pero no había planificación para su otorgamiento, por lo tanto, hubo estafas a la nación, ahora «sabremos cuantas disponemos, para qué vamos a utilizarlas y a quien se las vamos a otorgar».