Cientos de hospitales estadounidenses están siendo blanco de ciberataques por los mismos piratas informáticos rusos que los funcionarios e investigadores estadounidenses temen que puedan sembrar el caos en torno a las elecciones. Así lo reseña un reportaje de Nicole Perlroth para The New York Times.
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Los ataques a hospitales, clínicas y complejos médicos estadounidenses están dirigidos a desconectar esas instalaciones y mantener sus datos como rehenes a cambio de pagos de rescate multimillonarios, justo cuando los casos de coronavirus aumentan en todo Estados Unidos.
«Esperamos que cunda el pánico», dijo en ruso un hacker involucrado en los ataques durante un intercambio privado que fue captado por Hold Security, una compañía de seguridad que rastrea a los ciberdelincuentes.
Algunos hospitales en el estado de Nueva York y en la costa oeste reportaron ataques cibernéticos en los últimos días. Los funcionarios del hospital enfatizaron que la atención de pacientes críticos no se vio afectada.
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Los piratas informáticos rusos, que se cree que tienen su sede en Moscú y San Petersburgo, han estado intercambiando una lista de más de 400 hospitales a los que planean atacar, según Alex Holden, el fundador de Hold Security. Quien compartió la información con Holden, afirmó que los piratas informáticos aseguraron haber infectado a más de 30 de ellos.
Tres agencias gubernamentales, el FBI, el Departamento de Salud y Servicios Humanos y la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad del Departamento de Seguridad Nacional, advirtieron a los administradores de hospitales e investigadores de seguridad sobre una «amenaza creíble» de ciberataques a hospitales estadounidenses, según un ejecutivo de seguridad que escuchó el informe.
Los funcionarios e investigadores no nombraron los hospitales afectados, pero el Sonoma Valley Hospital en California dijo que todavía estaba tratando de restaurar sus sistemas informáticos después de una intrusión la semana pasada. El Sistema de Salud St. Lawrence en Nueva York confirmó que dos de sus hospitales, Canton-Potsdam y Gouverneur, fueron afectados por ataques de ransomware que hicieron que apagaran los sistemas informáticos y desviaran las ambulancias. El Centro Médico Sky Lakes en Oregon también fue paralizado por un ataque de ransomware que congeló los registros médicos electrónicos y retrasó las cirugías, dijo un representante del hospital.
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A los empleados de ese hospital, en Klamath Falls, Oregón, se les dijo: «Si es una PC, apáguela», señaló Thomas Hottman, oficial de información pública de Sky Lakes.
No estaba claro si esos ataques estaban relacionados con la campaña de piratería en curso. Pero las últimas violaciones estuvieron vinculadas a los mismos piratas informáticos rusos que retuvieron a Universal Health Services, una red gigante de más de 400 hospitales, como rehenes con ransomware el mes pasado en lo que entonces se consideraba el mayor ciberataque médico de ese tipo.
